Relatos Eróticos Filial

Mi historia incestuosa con mi familia. | Relatos Eróticos de Filial

Publicado por Juancesoler@hotmail.com el 04/11/2015

Hola mi nombre es Juan, tengo 39 años actualmente estoy casado, todo ocurrió cuando yo tenía 17 años, en esa época vivíamos en un pueblo a las afueras de Bogotá con mis padres y mis 2 hermanas llamadas Liliana y Sandra las cuales les llevo 1 y 2 años de diferencia.
A mis padres les gusta hacer asados y compartir con mi familia los cuales siempre asisten, llegaban tíos, tías, primos, primas, los novios de mis hermanas era un grupo bastante grande.
Se tomaba y se bailaba, la pasábamos bastante bien, la casa es muy grande tiene 6 habitaciones y mi madre siempre las arregla con colchonetas para los que se quieran quedar a dormir.
Yo ese día la pase con mi prima Sofía, ella en esa época tenía 17 años también, estuvimos bailando y tomando contábamos chistes la estábamos pasando muy bien, ya a eso de las 9 de la noche nos encontrábamos bastante prendidos por los tragos que habíamos tomado y comenzamos a tener conversaciones más atrevidas con mi prima Sofía, ella ya tenía un cuerpo bien desarrollado y formado.
Juan: ¿Prima eres virgen?
Sofía: No primo no soy virgen, he tenido varias relaciones con mi novio, pero que no me siento a gusto con él, porque tiene un pene muy chiquito, yo quiero tener una polla bastante grande y sentirme llena.
Juan: Primita mi polla es bastante grande…
Sofía: No te creo primo.
Juan: ¿quieres que te la muestre primita?
Sofía: ¿Está bien muéstramela, pero en dónde?
Juan: Ve a la parte de atrás de la casa al depósito, donde mi mama guarda los enseres que no utiliza.
Sofía se paró y se dirigió para allá ya que en la casa estaban todos mis familiares y no podíamos despertar ninguna sospecha, yo la seguí en seguida.
Sofía: ¿Bueno ya estamos aquí muéstramela?
Juan: Me baje los pantalones y se la mostré, en ese momento yo ya la tenía bastante erecta por el morbo que sentía.
Sofía se quedó mirando mi pene con los ojos de sorprendida.
Sofía: huy primito te felicito tienes un pene hermoso y bastante grande vas hacer un gran machote con las mujeres, que envidia.
Juan: ¿Quieres tocarla primita?
Sofía: Somos primos y eso está mal.
Juan: ¿por favor prima tócala no más?
En ese momento ella la cogió con la mano y hay sentí un escalofrió de excitación enorme no podía aguantar, cogí a Sofía y le di un beso en la boca la cual ella acepto sin ningún reparo, después le mande la mano a unos de sus senos y comencé a frotárselos, ella comenzó a excitarse y a gemir de placer, la quería clavar en ese instante, cuando de repente comenzaron a buscarnos para la foto familiar, escuchábamos Juan Sofía donde están.
En ese momento me subí los pantalones y salimos de ahí sin que se dieran cuenta.
Juan: ¿Prima Sofía te espero en mi cuarto después de que nos tomen las fotos y compartamos un rato con ellos para no levantar sospecha alguna?
Sofía: Listo primo, quiero tener tu polla dentro de mí, quiero sentir una polla de ese tamaño, no me voy a marchar de tu casa hasta que me penetres esa cosa tan rica que tienes.
Esas palabras de mi prima Sofía me excitaron bastante, estuvimos un buen rato compartiendo con toda mi familia.
Al cabo de una hora le hice señas a mi prima Sofía para que nos fuéramos a mi habitación y ella me respondió con señas que sí.
Ella arranco adelante y yo espere unos 15 minutos para no levantar sospecha alguna y la seguí a mi habitación.
Llegue a mi habitación la luz estaba apagada y bastante oscuro solo podía ver la silueta del cuerpo de Sofía acostada en la cama, en ese momento de calentura y morbo me quite la ropa y me lance a la cama sobre ella, le quite la ropa con bastante delicadeza, no pronunciábamos ninguna palabra, le comencé a chupar los senos, parecía un ternero mamando, ella tenía sus senos bastante duros una delicia, después baje mi mano en su vagina y comencé a frotarle el clítoris, ella a penas se retorcía de placer y gemía, ya la tenía bastante húmeda, ella después se inclinó y me comenzó a mamar mi pene que lo tenía súper erecto, yo le hice una mamada en su cuevita espectacular, no podía aguantar más, le quite la cabeza de mi polla la acomode en cuatro dirigí mi polla a su rico orificio vaginal y la comencé a penetrar despacio, mi verga bregaba mucho para darse paso en esta concita hasta que se la metí completamente, para ser virgen mi prima estaba muy estrecha, ella gemía de placer, comencé el vaivén del meter y sacar y ella gemía de placer estuve unos 15 minutos así hasta que no aguante más y me vine dentro de ella, la llene de mi leche, ella apenas gemía y su respiración entre cortada, quede bastante exhausto y me recosté un rato con ella.
Cuando de repente escucho a Sofía decir: ¿Camilo estuviste espectacular?
Yo no entendía por qué me decía Camilo, me levante y encendí la luz, ohhhhhh sorpresa que me llevaría, era mi hermana Liliana ella duras penas tenía 16 añitos.
Los dos quedamos estupefactos incrédulos, nos quedamos como 2 minutos mudos y con una cara de sorprendidos.
Después de eso reaccione y le dije a mi hermana Liliana ¿Que está pasando aquí?
Liliana: Eso mismo te pregunto yo.
Liliana: Pensé que tú eras Camilo mi novio.
Juan: Yo pensé que tú eras Sofía la prima.
Liliana: Hermano que hemos hecho, hemos tenido sexo los dos, que vamos hacer.
Juan: Hermanita todo fue una confusión, por favor no nos culpemos.
Liliana: En la reunión tuve problemas con mi novio Camilo y yo le dije a él que si quería arreglar las cosas lo esperaba en la habitación tuya, ya que esa habitación mi mama la deja para nosotros, porque los otros familiares utilizan las demás y como la familia es de tiro largo, yo podría tener un encuentro íntimo con mi novio.
Juan: Yo me cogía la cabeza no sabía qué hacer.
Liliana: Hermanito no tenemos la culpa fue una confusión….
En ese momento me vestí y salí de mi habitación totalmente confundido y me preguntaba dónde está mi prima Sofía, la comencé a buscar hasta que la encontré y le dije: que te hiciste.
Sofía: Fui a tu habitación y vi a tu hermana Liliana acostada yo me retire y volví a la reunión familiar y tu porque te demoraste en buscarme.
Juan: Me puse a hablar con mi hermana porque estaba de pelea con su novio y le estaba dando algunos concejos.
Sofía: ¿Quiero probar tu polla?
Juan: espérame aquí ya regreso….
Me dirigí a mi habitación y le dije a mi hermana Liliana que me dejara solo en la habitación ya que vendría Sofía.
Liliana: Ve por ella que yo ya bajo……
Volví donde estaba Sofía y cuando veo a Liliana con mi familia le hago señas a Sofía para que vaya a mi habitación.
Ya en ese momento ya estaba recuperado de la penosa faena que había tenido con mi hermana, he iba a tener la segunda con mi prima Sofía. Llegamos a mi habitación, nos desvestimos, la cogí y la empuje en la cama la comen se a besar con desespero lamia sus senos le acariciaba su clítoris y ella comenzó a chuparme el pene que ya estaba en su máximo esplendor.
Sofía: Huy primo tu pene me huele a fluidos vaginales.
Juan: Es impresión de tuya, es por lo que estas bastante excitada.
No sé si se comió el cuento pero seguimos en lo nuestro, la cogí y le abrí sus dos piernas y me puse en posición para penetrarla en su vagina que se encontraba bastante húmeda, puse mi pene a la entrada de su cuevita y comencé a perforarla, ella gemía de placer.
Sofía: Huy primo que verga tan deliciosa tienes, me estás haciendo ver estrellas, métamela toda hasta el fondo, quiero tener toda tu leche dentro de mí.
No puede aguantar mucho tiempo cuando explote dentro de ella derramando gran cantidad de leche llenándole toda la vagina de semen, nos quedamos uno 20 minutos hay nos cambiamos y volvimos a la reunión fue una experiencia deliciosa.
Al otro día mis familiares se fueron y nos quedamos mis padres y mis 2 hermanas en casa, mis padres comentaban que la reunión había salido muy bien y que todos se fueron contentos.
En ese momento nos miramos con mi hermana Liliana con cara de asustados.
Ese mismo día llame a mi hermana y le pregunte que paso con Camilo y ella me respondió que había hablado con él por celular y que habían terminado la relación, también me dijo que cuando le dijo que lo esperaba en la habitación él se había marchado para su casa, me dio pesar y le dije eres muy bonita y hay bastantes hombres los cuales puedes conocer, y que lo que había pasada entre nosotros dos, tendría que ser un secreto que llevaríamos hasta la sepultura y ella me dijo que no me preocupara.
Pasaron unos 3 meses, cuando de repente mi hermana Liliana comenzó a sentirse mal, mi madre preocupada la llevo al médico para que le hicieran exámenes y oh sorpresa mi mama llega a casa y nos dice que Liliana está embarazada, eso fue un baldado de agua fría para todos ya que ella tenía en ese momento 16 años.
Mi padre se cogía la cabeza no podía creerlo, yo quede de una sola pieza, mi padre se puso furioso y le dijo a Liliana que si el papa de ese niño era Camilo el novio de ella.
Liliana: No padre.
Padre: ¿Liliana quién es el padre de esa criatura?
Liliana: con Camilo termine hace rato, el padre del hijo que estoy esperando, es un chico que conocí y es extranjero, no tengo ningún dato de esa persona, ya que estaba de excursión por Colombia y las cosas pasaron muy rápido.
No podía creer lo que estaba pasando, me volvió el alma, respire profundo ya que estaba preocupado que le dijera mis padres lo sucedido.
Padre: Liliana debes asumir las consecuencias de lo sucedido y no la tendría más en la casa.
Las cosas en casa transcurrieron con un ambiente bastante incomodo yo me dirigí a donde mi hermana y le dije: ¿Liliana quién es el papa?
Liliana: No se haga el pendejo Juan, pues usted imbécil, si yo me voy de casa usted tendrá que ayudarme económicamente.
Juan: No te preocupes cuenta conmigo.
Liliana: Tu sabes hermano que yo nunca contaría este secreto.
Paso un mes más cuando mi Tío llama a mi papa y le dice que Sofía esta embrazada, que tiene 4 meses.
Mi padre nos comenta y todos quedamos fríos, yo con mi hermana nos miramos a los ojos ya que ella sabía que yo había tenido sexo con Sofía.
No podía creer lo que estaba pasando, mi padre nos dijo: nos vemos más tarde voy a verme con mi hermano que él quiere hablar conmigo personalmente.
Yo quede frio y con una mirada de susto que no podía ocultar, mi hermana Liliana se acerca y me dice tranquilo esperemos a ver qué pasa y que regrese mi papa a ver que nos dice:
Cuando vemos que mi papa llega a la casa con una cara de histeria gritando JUUAAANNNNN venga para acá, yo estaba muy asustado, me cogió y me dio una cachetada y me dijo: ¿si sabes lo que has hecho? embarazaste a Sofía.
Yo quede de una pieza, mi hermanas me miraban mi madre agacho la cabeza estaba acorralado, mi padre me dijo pues ahora caballero tendrás que responder por ese hijo ya hable con su Tío y se tendrán que casar.
Padre: Váyase Juan de aquí que no lo quiero ver.
Me fui y me encerré en mi habitación, al rato me golpean la puerta, era mi hermana Liliana la hice seguir y me dijo lo hecho, hecho esta, que afrontara las consecuencias.
No podía creer que iba a ser padre por segunda vez, había embarazado a mi hermana Liliana y a mi prima Sofía.
Cuando Sofía tenía 7 meses de embarazo y mi hermana también, mi familia me mando a vivir con Sofía.
Pasaron los meses y mi hermana Liliana tuvo un hermoso niño y a los 2 días Sofía tuvo una hermosa niña. En ese tiempo yo vivía ya con mi prima en un pequeño apartamento que nos había dado mi tío en Bogotá y estaba trabajando en la empresa de él.
Así transcurrió un año, mi hermana con el niño y mi prima con la niña, cuando estaba teniendo sexo con Sofía ella me dice:
¿Juan te acuerdas que cuando tuvimos sexo en tu casa y te estaba mamando el pene y te dije que te olía a fluidos vaginales?
Juan: Si me acuerdo, era impresión tuya ya que estabas muy excitada.
Sofía: ¿Yo sé quién es el papa del hijo de tu hermana?
Juan: ¿Quién es?
Sofía: Es tu hijo, mi prima Liliana ya me lo confeso.
Yo volví a quedar mudo y le dije a Sofía que había sido una equivocación y le explique lo ocurrido.
Sofía me miro a los ojos y me dijo que ella no había hablado con mi hermana Liliana, que me había dicho eso porque tenía sospechas y yo como un imbécil caí en su trampa y le confesé todo a mi prima esa noche.
Sofía: no te preocupes Juan, yo no diré ni una sola palabra.
Al cabo de un años me llama Liliana y me dice: Hermano estoy aburrida viviendo en casa de mis padres, es insoportable vivir con ellos, será posible que me des posada unos meses con el niño mientras, consigo algún trabajo en Bogotá y me ubico.
Juan: Tengo que hablar con tu prima a ver qué me dice.
Le comente a Sofía lo hablado con mi hermana y ella me dijo: Juan no hay ningún problema, ella es tu hermana y eres el papa de esa criatura hay que ayudarlos.
Al día siguiente llame a mi hermana Liliana y le dije: Hermana vengase a vivir con nosotros.
Liliana: Gracias hermanito en la noche estaré ahí con nuestro hijo.
Fue así que ella llego y la recibimos, le habilitamos un cuarto para ella y el niño.
Paso un mes y todo marchaba bien, un viernes llegue al apartamento tarde.
Sofía y mi hermana Liliana estaban tomándose unos tragos, me cambie de ropa y pase a acompañarlas, me ofrecieron un aguardiente y comenzamos a hablar, en ese momento mi prima y mi hermana estaban un poco prendidas.
De repente se levanta Sofía y dice: juguemos a la verdad o se atreve.
Liliana: Sí juguemos.
Juan: Está bien.
Comenzábamos de derecha a izquierda en mi lado estaba Sofía y le tenía que decir a mi hermana ¿la verdad o se atreve?
Liliana: La verdad.
Sofía: ¿Cuál ha sido la mejor experiencia sexual que has tenido?
Liliana: Con el papa de mi hijo ya que con el perdí la virginidad.
Con Sofía nos miramos y luego mire a mi hermana que tenía los cachetes del rostro colorados.
Ahora le tocaba a mi hermana hacerme la pregunta la verdad o se atreve, yo le contesto: la verdad.
Liliana: ¿Antes de dejar embarazada a mi prima Sofía, te gusto alguna otra mujer?
Juan: Si... precisamente hubo una mujer antes que Sofía con la cual la pase muy rico.
Mi hermana se puso colorada y Sofía nos observaba.
Ahora me tocaba a mí preguntarle a Sofía la verdad o se atreve:
Sofía: La verdad.
Juan: ¿Qué es lo que más le gusta de mí?
Sofía: La verga que tienes, la tienes bastante grande, gruesa y caliente, me encanta cuando me llenas la vagina de leche.
Nos estábamos poniendo bastante cachondos con las respuestas y estábamos bastante prendidos por los tragos que consumíamos.
Sofía: ¿Prima Liliana la verdad o se atreve?
Liliana: la verdad.
Sofía: ¿Quién es el papa de tu hijo?
Liliana: Un extranjero que nadie conoce prima.
Sofía: ¿La verdad prima, yo no te creo eses cuento?
Mi hermana me miro y luego le dijo a mi prima: un extranjero.
Sofía de inmediato se paró y le dijo a mi hermana: Yo ya se lo que paso, le saque la verdad a tu hermano poniéndole una trampa, mi hermana Liliana agacho la cabeza y se puso a llorar.
Sofía: Tranquila prima, es un secreto y nadie se enterara.
En ese momento ya estaba todo consumado y mi hermana se tranquilizó, mi hermana me pregunta: ¿la verdad o se atreve?
Juan: La verdad.
Liliana: ¿Volverías a tener sexo conmigo?
Juan: Por supuesto hermanita, si tú prima Sofía me lo permite lo haría de nuevo.
Sofía: ¿Liliana la verdad o se atreve?
Liliana: Me atrevo.
Sofía: ¿Quiero verla teniendo sexo con tu hermano otra vez?
Mi hermana se levantó y me miro, se comenzó a quitar la ropa hasta quedar totalmente desnuda luego se dirigió hacia mí y me bajo la bragueta, me saco la polla y comenzó a mamármela.
Sofía la miraba y se acariciaba los senos, en ese momento mi hermana me comenzó a quitar toda la ropa, ya cuando me tenía desnudo me sentó en el sofá y se subió sobre mí, cogió mi pene y se lo coloco a la entrada de su vagina y con un movimiento sutil se sentó hasta que tenía toda mi verga dentro de su conchita.
Comenzó a mover sus caderas a un ritmo frenético, yo estaba feliz, estaba teniendo sexo con mi hermana otra vez, en ese momento estaba que estallaba y le dije a mi hermana que me iba a correr, ella me dijo que no lo hiciera ya que no estaba planificando.
Sofía: Liliana tienes que recibir toda la leche de tu hermano para eso se atrevió y yo quiero verte a ti Juan como la llenas totalmente.
Juan: Sofía como voy a hacer eso, la puedo dejar otra vez preñada…
Sofía: No me importa, ojala deje preñada otra vez a tu hermana…
Nos miramos con mi hermana Liliana y seguimos la faena hasta que no aguante más y me corrí en su vagina, era mucha leche la que tenía la deje totalmente llena, mi hermana estaba súper excitada se levantó con la piernas temblorosas y apenas salió mi pene de su vagina le comenzó a escurrir gran cantidad de esperma de su conchita, dejamos el sofá súper mojado.
Sofía al ver ese espectáculo estaba excitadísima.
Sofía: Ahora prepárate Juan porque quiero que me preñes a mí también.
Juan: Sofía dame unos minutos hasta que coja energías.
Mi hermana estaba todavía desnuda sentada en un sillón y Sofía se comenzó a desnudar, quería imitar a mi hermana he hizo lo mismo que ella, comenzó a mamarme el pene me chupaba los huevos hasta que yo ya volví a tener energías, mi pene se puso de nuevo erecto y ella lo tomo con sus manos y se lo ubico en la entrada de su vagina, se lo fue introduciendo hasta que desapareció mi verga, comenzó a cabalgarme era toda una vaquera del viejo oeste, de repente mi hermana se paró del sillón y comenzó a frotarle los senos a mi prima mi entras ella me cabalgaba, no aguanto mucho Sofía lo excitada que se encontraba y tuvo un orgasmo bestial, sentí que se le fue la respiración volteo los ojos y quedo sobre mi pecho.
En ese momento yo no me había corrido dentro de Sofía, levante a mi prima con sutileza y la deje aun lado del sofá. Cogí a mi hermana de un brazo y le dije:
Juan: Hermanita no alcance a correrme dentro de Sofía.
Liliana: hermanito no te aguantes esa calentura, te ofrezco otra vez mi conchita.
En seguida cogí a mi hermana en el borde del sofá y comencé de nuevo a penetrarla, dure unos 10 minutos así hasta que de nuevo la deje inundada de leche, apenas le corría mi semen en medio de sus piernas, nos quedamos ese día en la sala, al día siguiente nos levantamos como si nada hubiera pasado, había mucha confianza.
Pues a los 2 meses mi hermana Liliana me dijo que tenía un retraso, yo le dije que abortara y ella me dijo que había hablado con Sofía y que ella le había dicho que lo tuviera.
Liliana: hermanito lo voy a tener él no tiene la culpa de nuestros actos.
Juan: Hermanita estamos haciendo algo indebido.
Liliana: Lo indebido ya lo hicimos hace rato.
Sofía: No se preocupen los dos, somos una familia y eso es lo que importa.
Juan: Ahora faltas tú Sofía que también me digas que estas embarazada.
Sofía: Huy eres adivino Juan, claro que no me dejaste embarazada como a tu hermana, ella me lleva 20 días de ventaja, ya que ese día no te corriste conmigo, pero te cogí a los 15 días y dejaste tu semillita es algo por lo que hay que celebrar.
Juan: No puedo creer lo que ustedes dos me están diciendo, son unas locas no están cuerdas de esa cabeza.
Liliana y Sofía: No te preocupes las dos estamos de acuerdo y queremos tener una familia numerosa y que mejor que contigo Juan.
Ya tenía otra vez a mi hermana y mi prima embarazadas, en ese entonces mi hermana ya tenía 17 años pasaditos, Sofía 18.
Al cabo de 5 meses toda nuestra familia se enteró, sabían que tenía a mi prima Sofía embarazada y que mi hermana Liliana estaba embarazada también.
Juan: ¿Hermana y tú que vas a decir? tú sabes que lo mío es normal con Sofía pero usted…
Liliana: No te preocupes hermanito yo voy a decir que quiero ser una madre soltera y ya tengo edad para tomar mis decisiones.
Todo ocurrió normal ya toda mi familia estaba enterada, no podían hacer nada y lo mejor es que no se levantó ninguna sospecha, nuestro secreto estaba asegurado.
Hasta una inesperada visita que cambio nuestras vidas.
Un fin de semana mi otra hermana Sandra, le dio por hacernos la visita al apartamento, quería ver a mi prima a mi hermana y a sus sobrinos es algo normal, ella en ese entonces tenía 16 años.
Ese día recibimos a Sandra con alegría, preparamos una cena ya que ella se quedaría con nosotros todo el fin de semana, estuvimos hablando hasta tarde, hasta que llegó la hora de acostarnos.
Liliana: Hermanita Sandra quédate en la habitación con tus sobrinos, yo dormiré en la habitación de Sofía y Juan, ellos tienen un sofá así estaremos todos cómodos.
Sandra: Gracias hermanita.
Como de costumbre mi prima, mi hermana y yo siempre dormíamos en la misma habitación y teníamos sexo ya que éramos una familia, para nosotros era algo normal.
Al día siguiente como a eso de la 7 de la mañana, mi hermana Sandra entra a la habitación a llevarnos unos cafés y se lleva que sorpresa.
Nos encuentra en la cama totalmente desnudos, Sofía me tenía abrazado de espaldas y yo tenía ensartada a mi hermana Liliana con mi verga por detrás.
Sandra: oooh my god, que está pasando acá.
Enseguida mi prima Sofía y mi hermana Liliana se levantaron de un susto, lo más impresionante es que mi hermana Sandra se dio cuenta cuando mi verga salía del culo de mi hermana Liliana.
Sandra salió despavorida de la habitación, no podía creer lo que había visto.
En seguida mi hermana Liliana y mi prima Sofía salieron de la habitación para poder hablar con mi hermana Sandra.
Liliana Y Sofía: Sandra queremos explicarte todo, pero cálmate un momento.
Sandra: Como se atreven a decirme que me calme, y tu Liliana mi propia hermana clavada por mi hermano y tu prima acolitando todo esto.
Liliana Y Sofía: Sandra no es lo que parece, déjanos explicarte.
Sandra: ¿Explicarme qué? Que tienen sexo los tres.
Liliana Y Sofía: Mira Sandra tomate este calmante y déjanos hablar.
Al fin mi hermana Sandra se calmó un poco, seguramente por el calmante que le había dado Liliana y Sofía.
Liliana Y Sofía: Sandra déjanos explicarte todo desde un comienzo por favor y veras que nos vas a entender.
Ellas dos comenzaron a hablar con Sandra y le explicaron todo lo sucedido, ella como que supo asimilar la situación y entendió todo lo que nos había pasado.
Sandra: Huy tenaz hermanita y prima por todo lo que les sucedió, entiéndanme la impresión que me lleve, ahora nos las culpo y las entiendo.
Liliana Y Sofía: Ahora te pedimos a ti Sandra que guardes nuestro secreto.
Sandra: No se preocupen que yo no diré nada, díganme una cosa y esos hijos que están esperando son también de mi hermano Juan.
Liliana Y Sofía: Si Sandra, tomamos la decisión de tener una familia numerosa.
Sandra: Bueno pues los felicito a los tres, pero yo solo les voy a pedir un favor a ustedes.
Liliana Y Sofía: ¿Qué favor seria Sandra?
Sandra: Ustedes saben que yo tengo 16 años y en 4 meses cumplo los 17.
Liliana Y Sofía: Si sabemos que en 4 meses cumple los 17 ¿y qué quieres de nosotras?
Sandra: En 4 meses sabrán lo que yo quiero y espero me cumplan, no es una extorsión simplemente quiero que me cumplan.
Liliana Y Sofía: Listo Sandra nosotras haremos todo lo que esté en nuestras manos para cumplirte, no te preocupes por eso.
Al cabo de 4 meses, mi hermana Sandra visita a Liliana y ha Sofía.
Sandra: Hola Prima y hermanita las felicito por esos bebes tan hermosos que tuvieron.
Ellas dos habían parido mis otros 2 hijos con una diferencia de 20 días una de la otra, fueron 2 hembritas.
Sandra: Bueno hermanita y prima, ahora necesito que me hagan el favor que les había pedido.
Liliana y Sofía: Díganos Sandra que sería…
Sandra: Mis padres van a venir el fin de semana a visitarlos y yo quiero que mi hermano Juan me visite a mí en la casa.
Liliana y Sofía: No te entendemos Sandra lo que dices.
Sandra: Fácil necesito que ustedes dos hagan que mis padres se queden el fin de semana con ustedes y que mi hermano Juan se quede conmigo en la casa.
Liliana y Sofía: ¿Que dices Sandra?
Sandra: Si es lo que están pensando, yo quiero que mi hermano Juan me haga mujer como lo hizo con ustedes dos.
Liliana y Sofía: Sandra por favor recapacita, nosotros no le hemos dicho nada a Juan.
Sandra: Tendrán que convencer a Juan si quieren que les guarde el secreto a toda la familia.
Liliana y Sofía: Listo Sandra hablaremos con tu hermano para que te quedes con esa boca callada.
En seguida recibí una llamada en la empresa de mi Tío, era Sofía y mi hermana Liliana diciéndome que teníamos que hablar urgentemente.
Yo enseguida me asuste y pedí permiso para ir al apartamento y hablar con ellas dos.
Juan: ¿Que paso Sofía y Liliana?
Ellas dos me explicaron lo sucedido y me dijeron que no había alternativa que yo debía hacer lo que pedía mi hermana Sandra o sino toda la familia se enteraría de lo nuestro.
Juan: Toca acceder a sus peticiones para que se quede con la boca callada o si no se nos vendría el mundo encima.
Liliana y Sofía se comunicaron con mi hermana Sandra para decirle que todo estaba preparado que yo había aceptado.
Llego el famoso día, mis padres habían ido a visitar a mi hermana Liliana y a mi prima Sofía para conocer sus nuevos nietos y habíamos quedado que yo me quedaría tomando unos tragos con unos amigos.
Yo me dirigí a casa de mis padres para encontrarme con Sandra, llegue a casa y mi hermana me saludo con un beso en la boca.
Sandra: Hola hermanito te tengo preparada una sorpresa.
Juan: ¿Hola hermana como estas?
Sandra: Muy bien hermanito contenta de verte.
Juan: Me alegra mucho ¿y qué sorpresa me tienes?
Sandra: Hermanito quiero que me des mi regalo de cumpleaños.
Juan: ¿Y qué quieres de regalo?
Sandra: No te hagas el bobo, yo creo que mi hermana y mi prima ya te dijeron.
Juan: ¿Sandra estas segura de lo que mes estas pidiendo?
Sandra: Por supuesto que estoy segura, me excita todo lo que les ha pasado a ustedes y quiero ser participe también.
Juan: Hermanita piénsalo bien.
Sandra: Ya lo he pensado y estoy decidida.
Juan: ¿Bueno Sandra y donde lo quieres hacer?
Sandra: En la habitación de nuestros padres, ellos no van a estar sino hasta mañana.
Nos dirigimos a la habitación de nuestros padres, mi hermana entro al baño y yo me recosté en la cama, al salir mi hermana del baño tenía un liguero puesto, se veía hermosa dejaba ver sus senos bien paradito redonditos y un culazo hermoso yo enseguida quede asombrado.
Juan: ¿Bueno hermanita que quieres hacer?
Sandra: Quiero que me hagas tu hembra quiero perder la virginidad contigo.
Juan: ¿Eres virgen hermanita?
Sandra: Si hermanito soy virgen, solo me he masturbado todos estos años y ahora quiero ser tu hembra para que me folles, quiero entregarme a ti hermanito como lo has hecho con mi prima y mi hermana.
Eso me puso súper cachondo, en seguida la cogí de un brazo y la jale hacia la cama, la comencé a besar y ella me correspondía con una pasión increíble, le besaba el cuello y luego me dirigí a hacia sus senos los chupaba con tantas ansias y pasión que mi hermana gemía de placer, le comencé a sobar su vulva con mis manos le baje los pantis que tenía puestos y le comencé a meter un dedo luego dos le acaricia el clítoris, ella apenas se retorcía de placer, luego dirigí mi cabeza hacia su rica conchita y comencé a meterle mi lengua succionaba todos sus juegos estaba muy húmeda, ella ya no podía respirar de lo caliente que se encontraba.
Enseguida me quite la ropa que llevaba y salió esa imponente verga que tengo ya se encontraba súper tiesa, mi hermana al verla la agarro con sus dos manos y comenzó a chupármela lo hacía con desespero yo le dije: cálmate más despacio, seguramente por lo inexperta que era, en ese momento ya estábamos muy caliente y ella muy arrecha me levante y le dije:
Juan: Bueno hermanita ya es hora que pruebes un verdadero macho y que pruebes algo de sal, ya es hora de quitarte esas ansias que tienes.
Me dirigí a mi pantalón para sacar los condones que llevaba, cuando Sandra me dice:
¿Qué haces hermano?
Juan: Sacando los condones que traje, tenemos que protegernos.
Sandra: Ni lo pienses hermanito yo quiero tener tu verga dentro de mí vagina y sin ninguna protección, quiero sentir todo tu semen dentro de mi conchita, quiero saber que se siente.
Juan: Pero Sandra como vas a hacer eso acuérdate que paso con nuestra hermana.
Sandra: Son mis condiciones y si no las aceptas ya sabe que puede pasar.
Juan: Listo Sandra tu asumirás las consecuencia.
En seguida la cogí y la jale con bastante fuerza y me le monte encima, comencé a meterle mis dedos en su conchita con bastante rabia, la muy zorra antes lo disfrutaba, eso me puso muy cachondo, le abrí las piernas ubique mi glande en la entrada de su vagina y se la clave de sopetón con mucha rabia para que aprendiera a no extorsionarnos, mi hermana torció esos ojos parecía poseída se le fue la respiración yo pensé que la había jodido, saque un poco mi pene de su conchita y ella volvió a reaccionar me asuste bastante, entonces comencé el vaivén del meter y sacar, ella parecía una mujer de otro mundo tenía una mirada desorbitada a los 15 minutos ella me abrazo con sus piernas mi cadera y comenzó a mover la cadera, ya se estaba acostumbrando a mi trozo de carne, en ese momento comencé a metérsela con bastante fuerza y ella ya lo gozaba y yo también, duramos en esa faena como 20 minutos, le dije a mi hermana que estaba a punto de correrme y que iba a sacar mi pene de su vagina para no dejarla preñada, ella al escuchar eso cogió sus pierna y abrazo mis caderas no se quería soltar parecía una chimpancé, por más que yo quería soltarme no podía, no aguante mucho cuando me vengo dentro de ella, se me fue la respiración sentía que de mi pene salían litros de leche, ella al sentir toda mi leche caliente dentro de su vagina dio un suspiro y pego un grito, ella había tenido un orgasmo fenomenal lo sabía por las contracciones que tenía, al cabo de 5 min ella abrió las piernas y me soltó la cadera.
Podía ver como salía chorros de mi semen de la conchita de mi hermana era impresionante.
Al rato mi hermana Sandra me dice:
Huy hermanito eres delicioso, me dejaste exhausta eres todo un semental, nunca pensé que esto fuera tan maravilloso, me dejaste viendo estrellas me llevaste a otra dimensión, nunca pensé que dentro de mi cuevita me cabía ese trozo de carne tuya, me siento inundada por dentro, siento todo tu semen dentro de mí algo muy caliente, gracias hermanito.
Juan: ¿Ya he cumplido con mi trato hermanita?
Sandra: Todavía no hermanito, acuérdate que tenemos este fin de semana para los dos ya que nuestros padres están en tu apartamento con Liliana y Sofía.
Juan: ¿Y que más quieres hacer Sandra?
Sandra: Quiero tener sexo contigo toda la noche.
Yo quedé sorprendido, mi hermana Sandra era toda una zorra en celo, esa noche tuvimos 3 faenas más, ella ya se había acostumbrado a mi trozo de carne y no lo quería soltar, hicimos poses que nunca nos habíamos imaginado, ella supo sacar provecho y me saco hasta la última gota de leche que tenía.
Al otro día mi hermana llega a la habitación con un suculento desayuno.
Sandra: Despierta hermanito a desayunar porque nos toca aprovechar el último día que nos queda.
Juan: ¿Cómo así Sandra?
Sandra: Si hermanito quiero entregarte también mi culito, quiero que tú me desflores mi ano, ya te entregue mi conchita falta mi ano.
Juan: ¿Estas segura Sandra, eso te va doler mucho más?
Sandra: Si otras mujeres pueden y mi hermana Liliana también, porque yo no voy a poder.
Juan: Como tú quieras Sandra.
Al momento llega mi hermana totalmente desnuda y tenía embadurnado todo su cuerpo en aceite de almendra, se acercó y me dijo: bueno es hora hermanito relájate y saco mi pene de mi bragueta y comenzó a darle una mamada bestial, en seguida mi miembro le correspondió a esas mamadas y se comenzó a poner tieso parecía un roble.
Sandra se puso encima de mí, cogió mi pene y lo dirigió a su conchita con su mano, lo ubico a la entrada de su cuevita y comenzó a deslizar su cuerpo hacia abajo, podía ver como mi pene comenzaba a desaparecer dentro de su vagina, ya entraba con más facilidad dentro de su almeja, hasta que se lo trago todo y ella comenzó a cabalgarme un buen rato, movía sus caderas como una bailarina árabe yo estaba feliz viendo como mi hermanita gozaba, de pronto se quedó quieta torció los ojos echo la cabeza hacia atrás dio un suspiro y se desvaneció había tenido un orgasmo bestial.
En ese momento yo no me había corrido y le dije Sandra te encuentras bien y ella me respondió que sí, que el orgasmo que había tenido era algo fantástico.
Ella volvió a coger mi pene y comenzó a mamármelo yo me encontraba en la gloria, ahora hermanito prepárate para lo que viene.
Sandra volvió a ponerse encima mío cogió mi verga y se lo ubico a la entrada de su ano y comenzó a introducirse ese trozo de carne, no podía creer lo que veía, mi hermana menor se estaba tragando mi verga, logro introducir mi glande dentro de la entrada de su ano, ella gemía por el dolor que sentía y me decía: hermanito creo que no voy a poder con tu verga tan grande, yo le dije hazlo muy suave para que no te lastimes, duramos como media hora y nada más le había entrado la mitad de mi verga, en ese momento yo la cogí de las caderas y de un sopetón le clave toda mi verga, ella metió un grito espantoso aayyyyyyy desgraciado me rompiste, yo creo que ese grito lo escucharon todos los vecinos, mi hermana me decía: eres un hijo de puta y yo más le sostenía las caderas la tenía clavada totalmente ella me gritaba suéltame y yo le decía: eso no eras lo que quería, desgraciado suéltame y yo le decía no te voy a soltar, duramos como 10 minutos en esa situación hasta que ella se calmó, creo que ya no sentía dolor, yo comencé con un movimiento muy suave y mi hermana comenzó a disfrutar, la fui soltando de las caderas para ver como ella reaccionaba y para mi sorpresa comenzó a mover sus caderas estaba totalmente ensartada con mi verga y la estaba gozando, de repente mi hermana me dice: hermanito quiero tu leche dentro de mis intestinos lléname por favor, esas palabras fueron afrodisiacas para mí no aguante mucho y de repente estalle con una gran cantidad de leche, mi hermana al sentir inundado sus intestinos metió un grito apretó los dientes y se desvaneció en mis hombros, quedo como privada, al rato mi hermana me dice en el oído, por favor no la saques déjamela hay, le hice caso nos quedamos dormidos con mi verga dentro del culo de mi hermana Sandra.
Al cabo de 4 horas moví a mi hermana Sandra y con delicadeza retire mi verga de su culo, al sacarla pude ver como comenzaba a escurrirle gran cantidad de semen de su culo, me bañe, me cambie y me dirigí a mi apartamento a Bogotá ya que mis padres estaban de regreso y no podía levantar sospecha.
Paso un mes y medio y yo no me hablaba con mi hermana Sandra, hasta que un día me llama.
Sandra: ¿Hola hermanito porque tan perdido?
Juan: Hola Sandra como esta.
Sandra: Yo muy contenta y feliz
Juan: Y eso porque estas tan contenta.
Sandra: Porque voy a hacer madre y tu papa otra vez.
Juan: Que dices Sandra, que estás diciendo.
Sandra: Si hermanito eres todo un semental estoy preñada de ti y eso era lo que yo quería.
Juan: Sandra que lo cura piensas hacer, por favor no me hagas eso.
Sandra: Yo también quiero darte hijos hermanito así como mi prima y mi hermana Liliana y además ellas no pueden decir nada ya que tenemos que guardar este secreto mutuamente y quiero gozármelo a ti como ellas te gozan.
No podía creer lo que me decía mi hermana Sandra ya no había reversa tenía que asumir otro descalabro en mi vida.
Enseguida me comunique con mi prima Sofía y mi hermana Liliana y le comente lo que me había dicho me hermana Sandra.
Liliana y Sofía: No te preocupes Juan, ya suponíamos nosotras que Sandra estaba buscando lo mismo, ella simplemente se aprovechó de las circunstancias.
Juan: ¿Y ahora que vamos hacer?
Liliana y Sofía: Pues será que lo tenga y asumir que se venga a vivir con nosotros, así podremos cumplir con nuestro proyecto de tener una familia numerosa, además tú Juan vas a tener tres hembras más con quien gozar, véalo positivamente.
En ese entonces yo tenía 20 años y ya era padre de 5 hijos, paso el tiempo y efectivamente mi hermana Sandra también se fue a vivir con nosotros y tuvo nuestro hijo, al cabo de 1 año adquirimos una casa más grande, ya que la familia estaba creciendo.
Yo me tenía que turnar para tener sexo con ellas, un día dormía con mi prima Sofía al otro día con mi hermana Liliana y al siguiente con mi hermana Sandra pero los fines de semana dormíamos los tres y teníamos unas orgias monumentales ya era una rutina que llevábamos.
A los 25 años yo ya tenía 5 hijos con mi hermana Sandra era la más fértil no la podía ni tocar porque quedaba preñada, con mi hermana Liliana tenía 4 hijos y con mi prima Sofía 4 hijos también.
Yo continúe trabajando en la empresa de mi Tío mis hermanas también consiguieron trabajo allá, la familia nos colabora mucho y Sofía siempre se quedó en casa cuidando los pequeños para ayudarnos mutuamente.
Mi jefe inmediato en la empresa de mi tío es mi tía Patricia. Ella es la menor de mis tías, tiene 31 años y está recién casada, la voy muy bien con ella, yo le entrego los informes que yo elaboro en la empresa hablo mucho con ella y de nuestras cosas, ella me pregunta por Sofía tenemos mucha confianza.
El fin de año mi Tío siempre hace la despedida en la empresa todos asistimos, esa noche estando celebrando en un club vi a mi tía Patricia llorando y le dije:
Juan: ¿Tía Patricia que te pasa?
Patricia: Nada sobrino no te preocupes
Juan: Tía dime por favor no te puedo ver así.
Patricia: Sobrino tu sabes que llevo un año de casada y con Enrique no hemos podido tener hijos yo no sé si soy estéril o si es él. Lo hemos intentado y nada que quedó embarazada yo amo a mi marido mucho y le quiero dar hijos no sé qué hacer.
Juan: ¿Tía y tú ya te hiciste exámenes para saber si tienes algún problema?
Patricia: la verdad no sobrino, me da miedo enterarme que yo sea la del problema y mi marido me abandone.
Juan: ¿Tía no me gusta verte sufrir te propongo algo pero no lo tomes a mal?
Patricia: ¿Dime sobrino como me puedes ayudar?
Juan: Tu sabes tía que yo he tenido hijos con Sofía tu sobrina y he sido muy efectivo, porque no probamos los dos y miramos a ver qué pasa, así tú te darías cuenta si tienes algún problema.
Patricia: Huy sobrino eso está mal.
Juan: Piénsalo tía es una solución.
Paso un mes cuando me llama mi tía Patricia a su oficina y me dice: Sobrino ya lo he pensado y quiero conservar mi hogar con Enrique ¿tu propuesta sigue en pie?
Juan: Por supuesto tía yo quiero que tú seas feliz con Enrique.
Patricia: Sobrino te espero el jueves en la noche en mi casa ya que Enrique estará de viaje y podemos aprovechar ese momento.
Juan: Listo tía cuenta con eso hay estaré.
Llego el jueves y me dirigí a la casa de mi tía Patricia, ella me estaba esperando en falda y con una blusita ceñida a su cuerpo que deja ver sus enormes senos.
Juan: ¿Hola tía como estas?
Patricia: Bien sobrino sigue ¿quieres tomar un vinito?
Juan: Bueno, gracias tía.
Me tome el vino y mi tía me dice: Sobrino subamos a mi habitación, nos dirigimos los dos con las copas de vino y nos recostamos en su cama, yo veía a mi tía que estaba bastante nerviosa.
Juan: Tía relájate no te preocupes.
Patricia: Sobrino tengo miedo por lo que vamos a hacer.
Juan: Tú quieres a tu marido pues conserva tu hogar, vamos a salir de dudas y así tú sabrás si tú tienes algún problema para tener hijos.
Ella me dio un beso en la boca y sin más reparo se comenzó a desvestir hasta quedar totalmente desnuda, yo quedé sorprendido con el cuerpo de mi tía, era una mujer muy voluptuosa unos senos grandes y un culo bastante pronunciado, en seguida yo también me comencé a desnudar y al ver mi tía mi verga me dijo:
Patricia: ¿Huy sobrino sí que estas bien dotado que pene tan grande tienes lo tienes mucho más grande que mi marido, mi sobrina Sofía debe estar muy contenta contigo?
Juan: Si tía ella está muy satisfecha.
Patricia: ¿Qué quieres te haga sobrino?
Juan: Lo dejo a tu iniciativa tía.
Enseguida mi tía cogió mi verga y me la comenzó a mamar, era toda una profesional.
Juan: ¿Huy tía que rico que lo mamas?
Patricia: ¿Si te gusta sobrino?
Juan: Me encanta tía.
Patricia: Acaríciame mis pechos sobrino que eso me excita, chúpamelos.
En ese instante comencé a acariciarle los senos y comencé a besárselos, ella comenzó a gemir.
Patricia: Eso sobrino así me encanta, me estas excitando mucho, te gusta cómo te chupo tu verga.
Juan: me encanta tía me estás haciendo llegar a la gloria.
Patricia: Sobrino me voy a poner en cuatro y quiero que me folles duro, quiero sentir todo ese tronco dentro de mí.
Juan: Si tía acomódate ponte en cuatro que te voy a dar gusto ya lo veras.
Ella se puso en cuatro yo acomode mi verga en la entrada de su vagina y enseguida se la introduje, ella al sentir la estocada gritaba como una loca era muy escandalosa.
Patricia: Huy sobrino que cosa más rica tienes, métamela hasta el fondo quiero sentirme llena dame duro, quiero que me revientes.
Yo estaba dándole duro a mi tía y ella gozaba como una loca.
Patricia: ¿Sobrino te gusta la conchita de tu tía?
Juan: Si tía esta riquísima eres muy ardiente y caliente.
Patricia: Pues aprovéchala sobrino es toda tuya.
Juan: Tía estoy a punto de correrme.
Patricia: Pues córrete sobrino que yo también me voy a correr.
En ese momento no aguante más y me metí una corrida espantosa era mucha leche que recibía mi tía en su conchita, ella la sintió y también tuvo un orgasmo fabuloso.
Patricia: Sobrino yo no había recibido tanta leche en mi vagina, me sentía llena eres fantástico, vea como escurre mi conchita y me sigue saliendo semen.
Juan: Gracias tía, espero que eso te ayude para descartar el problema que tienes.
Patricia: Si sobrino espero que funcione, pero tenemos que tener otras sesiones para estar seguros.
Juan: Si tía no te preocupes.
Patricia: Vamos sobrino y nos bañamos los dos, yo sé que Sofía te está esperando.
Juan: Si tía Sofía y mis hermanas.
Nos metimos al baño con mi tía para bañarnos y enseguida ella me cogió la verga en la ducha y me dio otra mamada fenomenal.
No aguante mucho y mi verga otra vez estaba tiesa, levante a mi tía y le di la vuelta le abrí las piernas y se la introduje en su culo, ella no puso mucha resistencia y la recibió con mucho agrado, comenzamos un vaivén hasta que me corrí dentro del culo de mi tía.
Patricia: Huy sobrino siento como llenas todo mi interior, siento tu leche caliente dentro de mis entrañas, eres un monstruo.
Juan: Tía voy a sacar mi verga de tu culo.
Patricia: Sobrino sácala despacio.
En ese momento retire mi verga del culo de mi tía y a ella le comenzó a salir todo mi esperma de su orificio.
Me bañe me cambie y le di un beso a mi tía de despedida.
Patricia: Sobrino que te vaya bien, gracias por todo y nos vemos en la empresa mañana.
Juan: Si tía nos vemos mañana.
Al día siguiente mi tía me llama a la oficina y me dice que hoy trabajaremos hasta tarde.
Juan: ¿Y eso tía?
Patricia: Acuérdate sobrino que tenemos que tener varias sesiones para comprobar si yo soy infértil.
Tuvimos que trabajar hasta tarde con mi tía 8 días seguidos, los empleados se iban y yo me queda con ella teniendo sexo en su oficina.
Al cabo de 40 días mi tía me llama y me dice:
Patricia: Sobrino no me llega la regla creo que estoy preñada, el fin de semana me hago la prueba de embarazo y corroboro lo que está pasando.
Juan: Listo tía cualquier cosa me informa.
El domingo mi tía me llama al celular y me dice:
Patricia: Sobrino estoy preñada, la del problema no soy yo es mi marido.
Juan: ¿Tía y que piensas decirle a tu marido?
Patricia: Que estoy embarazada de él.
Juan: Tía como vas hacer eso, yo tuve relaciones contigo para comprobar si tú tenías algún problema, pero nunca dijimos que lo tendrías, lo mejor es que abortes ya que quedo comprobado que tu estas sana.
Patricia: No sobrino lo voy a tener y le voy a decir a Enrique que va hacer papa.
Juan: Tía por favor no me hagas eso.
Patricia: No te preocupes sobrino será nuestro secreto y nadie se enterara.
En ese momento yo quede confundido y en mi mente pasaban muchas cosas.
Pasaron los meses y mi tía Patricia tuvo un hermoso niño era mi hijo, ella se veía muy contenta y su marido Enrique no se cambiaba por nadie estaba feliz.
Ese secreto nunca se lo comenté a Sofía ni a mis hermanas.
Seguí trabajando en la empresa normalmente, la relación con mi tía era normal como si nada hubiera pasado.
Al cabo de un año mi tía me llama a su oficina.
Patricia: Sobrino tengo un problema grave con mi marido.
Juan: ¿Que pasa tía se enteró de algo?
Patricia: No sobrino no es nada de eso Enrique quiere tener otro hijo.
Juan: Y que vas hacer tía, ya no cuentes conmigo.
Patricia: Sobrino no me hagas eso por favor yo quiero complacer a mi marido.
Juan: ¿Tía tu sabes lo que me estas pidiendo?
Patricia: Si sobrino pero no me abandones en este momento.
Me dio pesar con mi tía y comenzamos a tener nuestros encuentros sexuales para complacer sus demandas, dure follando con mi tía como mes y medio hasta que volvió a quedar preñada, ella medio las gracias y me dijo: te agradezco en el alma todo lo has hecho por mí.
A los siete meses me llama mi tía y me dice:
Patricia: Sobrino te felicito, me mande hacer una ecografía y voy a tener mellizos.
Juan: Como así tía ¿de verdad?
Patricia: Si sobrino no es fabuloso, mi marido está súper contento.
Juan: Y eso tía como se dieron las cosas para que tu esperes mellizos.
Patricia: Sobrino creo que como esta vez follamos más tiempo las cosas se dieron, eres todo un semental.
Juan: Pues los felicito y espero que estén contentos.
Patricia: Gracias sobrino a ti.
Pasaron los meses y mi tía dio a luz mis nuevos hijos, mi legado que estaba creciendo bastante.
Cuando yo ya tenía 26 años ya contaba con todo un equipo de futbol.
Mi prima Sofía tenía 3 mujeres y un varón, Mi hermana Liliana 2 mujeres y 2 varones, Mi hermana Sandra 4 mujeres y un varón y mi tía Patricia 1 mujer y dos varones, ya tenía un total de 16 hijos.
Cumplí los 27 años y me propuse no tener más hijos, una noche me llama mi tía Patricia y me dice que Enrique tiene una amante y que las cosas van de mal en peor, que se sentía muy sola.
Juan: Tía no te preocupes cálmate.
Patricia: Sobrino hace 4 meses no tengo relaciones con mi marido y eso me está matando.
Juan: Tía toma las cosas con mesura no te precipites.
Patricia: Sobrino ya he hablado con Enrique y nos vamos a separar y yo quiero que tú te enteres, ya que te tengo mucha confianza.
Juan: Piensen las cosas tía.
Patricia: La decisión ya está tomada.
A los 2 meses mi tía se separó de Enrique, al cabo de ese tiempo mi tía me comenzó a buscar.
Patricia: Sobrino que vas hacer el fin de semana te invito a la casa a tomarnos unos vinos me siento muy sola.
Juan: Bueno tía te puedo acompañar un rato.
Patricia: Te espero sobrino.
Ese día le dije a mi familia que iría donde mi tía ya que teníamos mucho trabajo represado en la empresa he íbamos adelantar.
Me dirigí donde mi tía ese día, ella me abrió la puerta y me hizo seguir, para ese entonces mi tía tenía 33 años y yo 27, me sirvió un vino y me dijo que se iba a poner algo mas como, subió a su habitación y yo me quede en la sala.
Como a la media hora ella se asoma por las escaleras y me dice:
Patricia: Sobrino sube que estoy en la habitación.
Juan: listo tía subo enseguida.
Entre a la habitación de ella y que sorpresa me llevaría, la encontré vestida con un liguero ceñido a su cuerpo y unas tangas diminutas se veía espectacular yo quedé asombrado.
Juan: Huy tía te vez espectacular que cuerpo tan hermoso tienes.
Patricia: Te gusta mi cuerpo sobrino, vez como me he cuidado después de tener nuestros hijos.
Juan: Me encantas tía, veo que te han servido los embarazos que has tenido conmigo.
Patricia: Si sobrino tú tienes muy buena mano eso te lo agradezco.
Juan: Gracias tía.
Patricia: Acomódate en la cama sobrino que la vamos a pasar fenomenal.
Juan: Tía si vamos a tener sexo quiero que nos protejamos yo no quiero tener más hijos.
Patricia: No te preocupes sobrino que cuando tú te vayas a correr las sacas.
Comencé a besar a mi tía con mucha pasión y ella me correspondía de la misma forma, unimos nuestras lenguas, le besaba el cuello, las orejas estaba súper excitado y ella también.
Patricia: Sobrino desvístete.
Juan: Si tía lo que tú digas.
Al estar yo desnudo ella me empujo sobre la cama y se montó encima, se quito sus diminutas tangas que tenía puesta, abrió las piernas y se introdujo toda mi verga en su conchita me cabalgaba como una desesperada.
Patricia: Huy sobrino que delicia me estás haciendo llegar a la gloria, hace rato necesitaba esto, extrañaba mucho tu verga.
Juan: Aprovéchala tía es toda tuya disfrútala.
Al cabo de un buen rato de estar cabalgando mi tía sobre le dije:
Juan: Tía estoy a punto de correrme.
Ella no me escuchaba estaba en un trance y seguía cabalgándome.
Juan: Tía levántate que me voy a correr.
Y ella seguía sin entenderme, ella se encontraba en otro mundo, no aguante mucho cuando me corro dentro de mi tía sentía como le llenaba toda su vulva y mi tía seguía cabalgándome, al rato mi tía echa la cabeza hacia tras y da un gemido de placer, era su orgasmo yo lo sentí me dejo totalmente empapado mi abdomen.
En seguida ella se levantó saco mi verga y podía ver cómo le escurría mi esperma con bastante líquido vaginal de ella, parecía una llave abierta.
Patricia: Estuviste fenomenal sobrino.
Juan: Tía yo te dije que te avisa cuando me fueras a correr.
Patricia: Sobrino no te escuche estaba en otra dimensión.
Juan: Y si te dejo otra vez preñada tía.
Patricia: Pues sobrino lo tendría con mucho gusto, no te preocupes.
A los 2 meses mi tía me llama y me dice que otra vez está preñada y que lo iba a tener.
La familia se enteró que mi tía estaba preñada y el exesposo de ella le pregunto que quien era el padre y ella le contesto que no se metiera en la vida de ella, que para eso estaban separados y que el había tomado la decisión de vivir con su amante.
A esa altura yo ya contaba con 17 hijos, seguí teniendo sexo con mi aren incestuoso ya no podía hacer nada y a todas me tocaba darle placer, claro que todas ellas comenzaron a planificar.
Comencé a criar a todos mis hijos 11 mujeres y 6 varones, cuando mis hijos estaban dentro de las edades 9 años y 5 años ellos me preguntaron qué porque yo dormía con sus mamas al mismo.
Yo les dije que éramos una familia muy especial y que éramos miembros de una filosofía antigua.
Mis hijos comenzaron a cuestionarme y hacerme preguntas: ¿Ósea papa que tú puedes tener sexo con ellas?
Juan: Si hijos es algo normal para nosotros, solo nosotros practicamos esa filosofía nadie tiene porque saberlo.
Hijos: Ósea padre que nosotras podemos tener sexo contigo.
Juan: Si hijas ustedes pueden tener sexo conmigo y sus hermanos con sus mamas, pero entre ustedes no pueden tener sexo ya que la raza se puede degradar.
Hijos: ¿Padre y a qué edad podemos tener sexo?
Juan: Hijos yo creo que en la etapa de pubertad, creo que es una edad adecuada.
Comenzó mi primera camada de hijas a cumplir los 16 años he hijos también, en ese entonces ya contaba con 6 hijas en esas edades y 2 varones.
Hijas: ¿Bueno papa nosotras queremos tener sexo contigo ya estamos en edad para hacerlo?
Juan: Listo hijas voy a comenzar cada día con una, les pasare un calendario.
Lo mismo hicieron Sofía, Liliana y Sandra con los varones.
Sofía Liliana y Sandra: Juan hemos hablado entre nosotras y vamos a dejar de planificar, queremos que dar preñada al azar.
Juan: Listo no veo ningún problema.
Efectivamente comencé a tener sexo con mis hijas y les quite esa pureza he inocencia que tenían en sus rostros las estaba haciendo mujercitas, lo mismo hicieron Sofía, Liana y Sandra con los varones era mucho el sexo que se emanaba en nuestra casa.
Al cabo de un año yo ya tenía a mis 6 hijas preñadas, lo mismo pasó con Sofía, Liliana y Sandra ya no sabíamos quién las que las habían preñado si mis hijos varones o yo.
Nuestra familia se metió una crecida monumental ya éramos 26 miembros contándonos todos.
Al cabo de 2 años salió mi otra camada de hijos eran 3 mujeres y 3 varones con los cuales continuamos con nuestra rutina incestuosa.
Seguimos con nuestras rutinas hasta que mi segunda camada de hijas quedaron preñadas lo mismo paso con Sofía, Liliana y Sandra también ya no teníamos control era todo un desorden yo tenía 11 hebras en mi hogar las cuales me las follaba a mi antojo y Sofía, Liliana y Sandra 6 varones para follar cuando quisieran.
En esa época ya vivíamos en una finca a las afueras de Bogotá ya los miembros de nuestra familia se habían multiplicado parecíamos conejos.
En 3 años al casamos a tener 54 miembros en nuestro hogar era algo descomunal.
Yo me seguía viendo con mi tía Patricia ya que ella era la madre de mis hijos y teníamos mucho sexo cuando nos veíamos, ella si siguió planificando menos mal. Los hijos de ella me veían como su primo yo los consentía y los paladeaba.
Ya estaban grandes los varones tenían 17 -16 años y las hembras 17 y 15 ya que una de ella era melliza.
Una vez los invite a la casa para que visitaran a todos sus primos y se quedaran ese fin de semana y ellos aceptaron con gusto.
Al llegar ellos se pusieron a jugar con todos sus primos y yo me dedique a tomarme unos tragos en la casa, al sentirme un poco prendido cogí a unas de mis hembras de la mano y la lleve a mi habitación y comencé a follarla con frenesí, ella se quejaba jadeaba y gritaba de dolor pero al final resulto gozando mi verga.
Al rato entra a mi habitación mi hermana Sandra y me dice:
Sandra: Que haces Juan mira lo que estás haciendo, te estas follando a tu prima, la hija de mi tía Patricia.
Yo ya en ese momento tenía toda mi verga dentro de la conchita de Margarita y no había nada que hacer, tampoco me había dado cuenta que era Margarita seguramente por los tragos que me había tomado y ella en ese momento ya gozaba de mi miembro dentro de su vagina
Margarita: Primo no pares sigue por favor.
Ella no sabía que yo era su padre, mi hermana al escuchar las palabras de Margarita cerró la puerta y nos dejó seguir con lo que habíamos comenzado.
Margarita: Huy primo que cosa más rica, me estoy encuentro en otro planeta es algo maravilloso lo que estoy sintiendo.
No aguante más y me corrí dentro de su cuquita, ella encogió su cuerpo torció sus ojos y dio un suspiro, había tenido un orgasmo fabuloso también.
Al sacar mi verga de su cuevita me di cuenta como le escurría toda mi leche entre fluidos y sangre había desvirgado a mí otra hija sin ella saber que yo era su padre.
Margarita me dio un beso en la boca y me dijo gracias primo, nos cambiamos y salimos.
Mi hermana Sandra apenas me miraba pero no decía nada.
Después de esa faena Margarita se la pasa conmigo, al día siguiente Margarita me busca y me dice:
Margarita: Primo tu sabes que yo tengo mucha confianza con mi hermanita Julia y le comente lo sucedido.
Juan: Como le vas a contar lo nuestro a tu hermana Julia.
Margarita: Tranquilo primo que ella no contara nada.
Yo en ese momento no sabía que decirles aparte que ellas no estaban enteradas que eran hijas mías.
Esa noche Margarita me dice:
Margarita: Primo quiero volver a tener sexo contigo.
Juan: Claro que si Margarita quiero que te vayas contenta para Bogotá.
Margarita: Primo quiero hacerlo junto al árbol de mango y en la oscuridad de la noche.
Juan: Si mi amor nos vemos a las 9 de la noche junto al árbol de mango.
Llego la hora y me dirigí hacia el árbol de mango estaba muy oscuro y Margarita ya me estaba esperando.
Tendí una sábana en el pasto para estar más cómodos en seguida le dije: Margarita quiero que me chupes la verga quiero que aprendas conmigo muchas cosas, ella me respondió: Si primo lo que tú me digas, me baje los pantalones y saque mi verga ella la cogió con las 2 manos y comenzó a chuparlo se sentía delicioso.
Luego yo comencé a quitarle la ropa con delicadeza y comencé a frotarle la vaginita, ella comenzó a excitarse, lo sentía por su respiración entre cortada que tenía, duramos un buen rato acariciándonos hasta que ya estábamos totalmente desnudos.
Juan: Margarita acuéstate que te voy a dar de probar más lechecita.
Margarita: Si primo pero hazme pasito con cariño.
Juan: No te preocupes tendré cuidado.
Margarita abrió las piernas y yo ubique mi trozo de verga a la entrada de su cuevita comencé a introducirla pero la verdad no me entraba.
Juan: Margarita hoy amaneciste muy estrecha.
Ella no pronunciaba ninguna palabra, volví a intentarlo y a duras penas entro mi glande. Margarita dio un grito y se tapó la boca con las dos manos para no hacer ruido, veía que le estaba saliendo lágrimas de los ojos, la seguí introduciendo y veía como mi verga habrá camino con mucho esfuerzo dentro de su cuevita hasta que entro totalmente yo sentía mi verga aprisionada la deje en esa posición unos 10 minutos para que ella se fuera acostumbrando al tamaño, al cabo de ese tiempo comencé con movimientos suaves y ya Margarita se sentía mejor comenzó a disfrutarla comenzó a decirme huy primo me dolió un poco pero ahora me siento bien.
Juan: me alegro Margarita que la estés gozando.
Margarita: Que bien se siente primo me siento llena.
Me di la vuelta sin sacarle la verga de su cuevita y le dije a Margarita que se montara sobre mí. Ella enseguida me hizo caso, ya que con esa pose ella era la que me cabalgaría. Comenzó con movimientos muy suaves en su cadera y al cabo de 15 minutos ya era toda una profesional cabalgándome, se movía como una potranca salvaje estaba gozando de mi polla duro 5 minutos más y se desvaneció sobre mi pecho, sentía sus fluidos internos y calientes en mi verga, sentía que me quemaba, era evidente que había tenido un orgasmo. Yo en ese momento aproveche para correrme dentro de ella era impresionante como la llenaba, me salía leche por montones, ella no reaccionaba nos quedamos recostados pecho con pecho unos 20 minutos cuando ella me dice en el oído.
Gracias primo, ha y de por cierto no soy Margarita soy Julia.
Era mi otra hija la menor la hermana de Margarita las dos muy astutas se habían con fabulado para esto y como son tan parecidas no me di cuenta.
Había desvirgado a las hijas que me faltaban y sobre todo a Julia con apenas 15 añitos, cuando saque mi verga de la conchita de Julia pude observar cómo le escurría un hilo de sangre de la vagina.
Actualmente creo que somos la familia más numerosa e incestuosa del mundo, ya que actualmente contamos con 72 miembros y mis otras dos hijas que también la deje preñadas.
Espero les haya gustado mi historia.

 

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