Relatos Eróticos Gays

Conociendo a mis tíos. Parte 1 | Relatos Eróticos de Gays

Publicado por Karmarelatos el 08/09/2023

En este relato contaré la historia que involucra a dos tíos muy lejanos, los cuales conocí hace no mucho tiempo, tiempo en dónde tuve la oportunidad de compartir una de las experiencias más excitantes de mi vida, pues ellos eran una pareja gay y a pesar de que ya anteriormente había experimentado el sexo gay, con ellos fue diferente pues al ser familia, el sentimiento de amor aumentaba la excitación y me hicieron pasar uno de los momentos más ricos de mi vida.

A ellos los conocí en una de las tantas reuniones familiares, sería extraño para mí ya que no conocía a ninguno de los miembros, eso cambio tiempo después, es por eso que este relato.

La reunión iba de lo más normal hasta que ellos llegaron, eran dos hombres verdaderamente atractivos, tanto que no parecían una pareja gay, al llegar al principio, el que era mi tío directo me miró de una manera bastante rara como escaneandome, después su pareja, mi tío político, también lo hizo hasta que los dos me regalaron una sonrisa, la reunión siguió con normalidad, hasta que uno de ellos se acercó a mi con la intención de iniciar una conversación.

Tío: Hola, como estás?
Yo:Muy bien tío, es un placer conocerlos, digo conocerte, lo siento es que es esto es nuevo para mi.
T: No te preocupes, es normal, nos da mucho gusto saber que tenemos un sobrino más en la familia paso mucho tiempo desde que naciste y hasta el día de hoy se nos hizo por fin conocerte, eres muy guapo.
Yo: Gracias jeje la verdad es que sabía muy poco sobre ustedes, muchas gracias se hace lo que se puede, conteste con cierto nerviosismo y mis mejillas se ruborizaron.

Toda la reunión seguimos conversando, más que nada era de lo que me gustaba hacer en mis tiempos libres, si tenia novia, etc. Las preguntas de rutina cuando conocer a alguien nuevo.

Cayó la noche y la reunión llegaba a su fin, mis tíos estaban por irse hasta que a la hora de despedirme de ellos, me hicieron una oferta que hasta el día de hoy no me arrepiento de haber aceptado.

T: Quieres venir con nosotros?
Y: No lo sé debo preguntarle a mis padres.
T: No te preocupes, ellos ya están enterados y nos dijeron que tú decides si venir o no.

Acepte con cierta duda pero también con gusto de poder conocerlos aún más. Y vaya que eso sucedió.

Pase unos días increíbles con mis tíos, fuimos a todos lugares, me contaron muchas anécdotas e incluso del día que se conocieron. Nunca creí que iba a tener una relación tan buena y cercana con ellos, hasta que uno de esos días lo inimaginable pasó.

Sucedió una noche mientras veía una película en su sala, estaba muy entretenido, eran más de las 12 de la noche y me sentía un poco cansado, y decidí ir a dormir, que fue lo que menos hice esa noche, pues casualmente al pasar por la puerta de su habitación ví algo que quizás me imaginaba pasaba algunas noches, pero no pensé en presenciarlo.

A pesar de la oscuridad vislumbre la caliente escena, mis tíos estaban semidesnudos solo con los boxers puestos, mientras se besaban y acariciaban hincados en su cama, al principio pensé en solo cerrar la puerta y alejarme de ahí, pero la escena me comenzó a excitar, solo unos minutos después, pude ver cómo ya sus boxers habían desaparecido, ya completamente desnudos, comenzaron un ritual de masturbación mutua que muy difícilmente olvidaré, pues al mismo tiempo se besaban y lamian sus pezones, llegó un momento en que uno de ellos se tumbó boca arriba en la cama mientras el otro unio sus vergas, gruesas ya por la excitación y comenzó a frotarlas por algunos minutos hasta que se separaron por un instante, en ese momento mi tío que hizo tal masturbación se puso en la cama en 4, para así poder recibir la lengua de mi tío en su culo, era una escena demasiado cruda y explícita tanto que a la fecha me masturbo recordando dicho momento, pude notar que mi tío tenía un bonito y sexy tatuaje en una de sus nalgas misma que mi tío mordía y nalgueaba con pasión, después de unos cuantos minutos mi tío ya disfrutaba de la verga de mi otro tío dentro suyo, gritaba arqueaba su espalda hacia atrás y buscaban sus bocas para así compartir ricos y húmedos besos, mi tío lo nalgueaba y le daba embestidas duras, yo ya tenía mi pene súper grande y grueso de presenciar dicha escena pero no hice nada hasta mucho después, finalmente cuando su encuentro estaba a punto de terminar mi tío cabalgaba salvajemente la verga dura de mi tío quien solo podía hacer gestos de excitación y placer al ver que su compañero subía y bajaba de su duro falo, también no perdía el tiempo y se movía de adelante hacia atrás mientras mi tío le hacía una deliciosa paja la cual hizo que mi tío finalmente explotará producto del placer proporcionado por mi otro tío, quien estaba debajo de el con su verga aún dura.

Mi tío no dudo ni segundos en sacarse el duro pene de su ano, cuando ya tenía su boca llena de ese delicioso pedazo de carne, su cabeza subía y bajaba mientras mi tío seguía con gestos de placer y tan solo pasar unos minutos mi tío termino con la boca llena de líquido blanco proveniente de ese delicioso manjar.

Terminando ese caliente encuentro no tarde en llegar a la que fue mi habitación durante ese tiempo y tan solo cerrar la puerta con seguro mi imaginación hizo que me dejara llevar, comencé a tocarme por encima de la ropa, mis manos eran traviesas y rápidamente hicieron que me sacará la delgada camiseta que llevaba puesta, mis manos se dirigieron a mis pezones los cuales llene de saliva y escupí, presa de la excitación que me rodeaba en ese momento, no tarde mucho cuando ya mis shorts y mi boxer terminaron en el suelo, comencé una masturbación un poco alternada entre suave y rápida, ya estaba completamente fuera de si cuando saque mi dildo y comencé a chuparlo con fiereza, iba del glande hacia la base del mismo, lamía los suaves testículos que este tenía, incluso logré hacerle una garganta profunda, lo cual casi hace que me asfixie pero no me importó, cuando estuve listo lubrique un con un poco de saliva mi ya dilatado ano, y suavemente comencé a meterlo, dándome nalgadas parecidas a las que mi tío había recibido minutos antes, mis gemidos eran bajos, mis pezones estaban realmente duros y sensibles así que mientras mi dildo me penetraban ayudado por una de mis manos la otra tocaba mis pezones, pegue mi dildo a la cabecera de la cama ayudado por la ventosa de la base y comencé a cogerlo con fuerza de adelante hacia atrás, gemia, me nalgueaba y mi respiración era agitada, hasta que decidí cabalgarlo intentando copiar la técnica de mi tío y aunque no fue lo mismo con un pene de plástico la excitación fue la misma, mi culito recibía oleadas de placer al igual que mi cuerpo quien ya no podía soportar más tiempo, así que me saqué la polla de mi culo y comencé a frotarlo con mi duro pene, que a estás alturas parecía una piedra seguía con esa rica sesión de masturbación, hasta que sentí unos espasmos de infarto, mi verga estaba a punto de descargar ese tan deseado liquidillo blanco, para lo cual cambie de posición con el fin de que esté cayera en mi boca, así lo hice y luego de unos segundos varios trallazos de lefa fueron a caer a mi cara y boca, sabía delicioso y aún calientita más, decidí quedarme así desnudo esparciendo mi semen por toda mi cara y saborear lo que se pudiera con mi boca, deje mi dildo a un lado y el sueño me venció cansado de tan excitante sesión.

Lo que pasó los días siguientes son para otra historia les contaré el excitante trío que tuve con mis tíos y esos dos manjares que tienen por penes. Mientras que también les contaré sobre la sesión de sexo de despedida que tuve con mi tío directo quien me hizo una confesión que me dejó perplejo y con ganas de volver a verlo.