Relatos Eróticos Gays

Mi primer trabajo fue de chapero. Como llegué a ser chapero | Relatos Eróticos de Gays

Publicado por Luis el 10/04/2016

Era mi primer año en la Universidad Complutense. Mi primera separación de mis padres que vivían en Burgos. Yo había llegado a la capital con mis esplendorosos 18 años, con ese aspecto nórdico que heredé de mi bisabuelo inglés, 1,87 m, pelo rubio y ojos azules. Unido a mi pertenencia a una familia acomodada castellana, me había convertido en el novio perfecto y en el yerno ideal de las hijas y de los padres amigos de los míos. El único problema es que a mi no me ponen los coños sino las pollas.

Sin embargo había llegado a los 18 completamente virgen, salvo algún frotamiento con mi amigo Miguel, algún morreo y alguna paja compartida. Salvo eso mi experiencia sexual era nula. Pensemos en una capital de provincias tan aburrida como Burgos y hace más de 20 años. No había ninguna oportunidad para un gay.

Madrid era otra cosa, aunque mis padres, austeros ellos, me habían inscrito en un Colegio Mayor regentado por gente de su confianza y me mantenían en una estricta penuria económica para evitarme las distracciones. Poco dinero y además administrado por el director del Colegio Mayor. Todo lo debía justificar.

Un día de aquel otoño decidí "independizarme" económicamente. Compre una revista de anuncios gratis, busqué posibles trabajos, no eran muchos y pedían experiencia, hasta que atraído por los anuncios de relaciones y relax, vi uno en el que pedían chicos masajistas para relax de caballeros solventes, y donde se anunciaban buenos ingresos económicos. Mi primera reacción fue contactar. Fui a un teléfono público ( en aquel momento todavía no se habían generalizado los móviles) y marqué. Una voz muy masculina contestó al otro lado. Inicié nervioso la conversación...

- Hola llamo por el anuncio de masajistas...
-Si, necesitamos chicos jóvenes para masajes..., bueno ya sabes, satisfacer a señores en lo que soliciten...,.

Yo seguía muy nervioso, sobretodo cuando te confirman que tienes que convertirte en puto, aunque ya lo intuyes...,

- Bueno, estás dispuesto a hacer de todo...
- Si..., pero que quiere decir de todo...
- Oye, ¿ que edad tienes? aquí solo puedes trabajar si eres mayor de edad.
- Si, tengo 20 años (mentí)
- ¿Y tienes experiencia?
- Bueno he hecho algunos cursos (volví a mentir)
-Oye chaval que eso no se estudia. Mira vente para aquí, estamos en la Calle xxxx núm. 15 1ª. Pregunta por Manuel Lebrija y ya hablamos.

Colgué y entonces empecé a tener dudas de si era buena idea entrar en un mundo tan sombrío como el de la prostitución, pero había dado el primer paso y no era cuestión de echarse atrás. Me puse en camino, La calle no estaba lejos y llegué en un cuarto de hora. en aquel momento los nervios atenazaban mi estómago, y al mismo tiempo sentía una excitación extraña ante lo desconocido. Llamé al portero automático:

- Manuel Lebrija
-Si, eres el chico de antes ¿no?
-Si
-Sube.

Abrió un hombre de unos 40-45 años, con la camisa abierta por donde surgía una buena mata de pelo moreno. No estaba delgado, aunque tampoco era gordo y se intuía algo de barriga. Cuando me vió dijo:

-Te dije que aquí son todos mayores de edad y tu no pasas de los dieciséis, así que no puedes estar aquí.

E hizo intención de cerrar la puerta. Yo puse la mano y le contesté

-Tengo dieciocho. Soy mayor de edad, le puedo enseñar el DNI.
-A ver

Le enseño el DNI y el todavía enfadado dice:

- No tienes veinte pero eres mayor de edad. Anda pasa Luis.

Me di cuenta que había descubierto mi identidad, pero ya estaba dentro. Lo seguí por un pasillo, pasamos por delante de una sala, que Manuel cerró antes, De una habitación salió un chico desnudo muy guapo, y al final del pasillo llegamos a un despacho. Su despacho. Después de cerrar la puerta se sentó y a mi me mantuvo de pie. dejó mi DNI sobre la mesa y me dijo:

- Bueno eres muy guapo y eso te ayudará en este trabajo, pero veo que no tienes ninguna experiencia. No importa que lo disimules.
- No.
- Pero habrás al menos follado con algún noviete.
-Pues la verdad...
-¿No tienes novio o amigo o algo?.
- A medias. Tengo un amigo y alguna vez nos hemos besado y nos hemos masturbado juntos...
-Ja, ja,ja, rió Manuel, os habéis hecho pajas. Que finolis. Masturbarnos, que finolis. seguro que eres un hijo de papá en una familia de reprimidos y has llegado a la capital y quieres despendolarte. Pedazo de maricón estas hecho. Que dirá tu padre si te ve convertido en un puto chapero.
Yo no sabía que decir. Pensaba que me había precipitado, pero que siempre tenía tiempo de no volver a ese lugar. pero en ese momento Manuel se fijaba en el DNI.
-Así que eres de Burgos. Vaya mamonazo. En Burgos solo hay militares y curas. ¿Tu eres hijo de militar o de cura?. Lo mismo da, porque aquí te vamos a follar ese culito virgen que tienes. Te vamos a convertir en una putita rubia de primera.

Yo ya pensaba que efectivamente había sido una mala idea ir allí. Me armé de valor y le dije a Manuel:

-Mire yo había venido aquí en busca de un trabajo y de unos ingresos para mis gastos en Madrid, pero visto lo visto no voy a aguantar que me insulte. Me voy.

Cuando me iba, me dijo:

-No te enfades, estaba de broma. Me gustas para mi casa. Aunque estás muy verde. Venga quédate y a cambio yo te prometo buenos ingresos y no decir en tu casa la marica que eres.

A pesar del tono distendido en que lo dijo, me di cuenta que había una posible amenaza. tenía la dirección del DNI y mi padre era efectivamente un militar un tanto carca. Opté por quedarme. Me dijo

- Muy bien, veo que eres listo Luis. Ahora enséñame tu precioso cuerpo, desnúdate.

Yo obedecí y empecé a desnudarme temblando de la excitación. Había hecho natación toda mi vida y estaba acostumbrado a desnudarme en los vestuarios, pero a partir de los 13-14 años siempre que me desnudaba delante de gente me empalmaba de la excitación. Por eso Miguel, que también practicaba natación, me había visto empalmado miles de veces igual que yo a él.

Delante de Manuel no fue diferente, antes de quitarme los calzoncillos ya mostraba una empalmada tremenda y aunque mi polla es de la media, casi 18 cm, el calzoncillo era tipo slip. Al verlo Manuel soltó.

-Vaya se nos ha puesto ya palote. Prometes Luis.

Al final quedo desnudo y Manuel me dice que me acerque. Yo voy junto a él que está sentado. Me hace girarme. me pone una mano sobre el culo y empieza a acariciármelo mientras dice "bonito, si señor bonito y virgen, hay que explotarlo". sigue acariciándome y baja hasta mi ojete y con un dedo inicia un pequeño masaje que me excita cada vez más. Me dice que me incline y sigue con su dedo frotándome y apretando el ojete, yo empiezo a gemir un poco

-Te gusta, ¿eh?. Si tu eres un puto de verdad. Mucho colegio privado pero al final sois todos unos cochinos.

Yo continuo inclinado sobre la mesa del despacho y Manuel me abre un cachete con una mano y con la otra me introduce un dedo, con lo cual me vuelvo loco. Gimo y gimo, cada vez mas fuerte, y el cada vez más rápido mete y saca el dedo.
-Guarra, que eres una puta guarra. Si tu padre te viera lo puta que eres.

Yo seguía en mi excitación. Mi polla estaba más dura de lo que nunca había notado. Me salía un hilo de líquido pre-seminal de la punta del capullo. Y ya gemía sin contención. De pronto Manuel paró, y me dijo

-Ahora vamos a ver como lo haces, venga chúpamela.

Yo no esperé que me dijera nada más. Estaba excitado y deseando tener una polla en mis manos, en mi boca o en mi culo. Así que me dirigí hacia su paquete, bastante gordo en aquel momento, excitado como estaba él también. Le desabroché el cinturón y el pantalón del traje y metí mi mano en busca de su tesoro. Toque una polla caliente y de buen tamaño, algo más grande que la mía. La saque de la ropa y vi que tenía el capullo mojado también de líquido pre-seminal. No lo dudé,, chupe el capullo, lo limpié del líquido que tenía y el que le salía y entonces me tragué la polla. empecé a succionar de arriba a abajo mientras movía la lengua por dentro, todo con una ansiedad. Manuel, mientras tanto se puso de pie, se desabrochó totalmente la camisa y se bajo pantalón y calzoncillo. Me agarró de la cabeza por las orejas y al tiempo que decía "Pues lo haces muy bien para ser la primera vez" empezó a empujar su polla que me llegaba a la garganta. Por unos momentos sentí asfixia per me recuperaba rápidamente y continuaba moviendo mi lengua ansioso por recorrer toda su verga.

Yo me notaba a reventar, mi polla estaba a 180º. Manuel también empezaba a gemir de gusto. Me decía
-Que boca tienes cabrón, pero que boca, parece que se la hayas comido a tu director espiritual toda la vida.

Nunca he tenido director espiritual, aunque no tenía intención de aclarárselo a Manuel. Su polla me estaba haciendo pasar un buen momento y yo empezaba a estar contento de haber ido a buscar trabajo allí. Me dijo, "cómeme los huevos también" y yo obedecí y empecé a lamer su polla desde la punta a la base, otra vez a la punta y, por debajo, otra vez a la base donde empieza el escroto. De ahí seguí lamiéndole los huevos peludos y morenos que tenía (y tiene porque nos seguimos viendo de vez en cuando, ahora él con más de sesenta y yo con casi cuarenta). Llegué a su ingle y allí saboree toda su hombría, con un sabor fuerte y agrio pero que me excitaba. Al mismo tiempo él me acariciaba la cabeza, las orejas, la espalda, con sus manos grandes, masculinas y fuertes.

Volví a subir por sus huevos hasta su polla y volví a engullirla toda entera, En ese momento yo sentía ganas de meterme esa pedazo polla por el otro agujero. La quería dentro de mi culo, sentirla. Paré y me dispuse a levantarme. Manuel me dijo,

-Que haces
-Quiero que me folles
-Menuda puta estas hecho. Tu culo vale dinero. Es un culo sin estrenar y yo quiero sacarle cuartos a eso. Así que haz el favor de seguir chupando que quiero correrme.

Un tanto decepcionado, seguí chupándosela, durante un cuarto de hora más. Pasado ese tiempo, Manuel volvió a agarrarme por la parte de atrás de la cabeza y con un movimiento sincronizado empezó a empujarla hacia él mientras empujaba su polla hacia mí. Me estaba follando la boca nuevamente. Con palabras entrecortadas me dice

-Quieres que me corra en tu boca o fuera
-mmmmggggllll
-Levanta la mano derecha y me corro en tu boca. Levanta la izquierda y me corro fuera.

Mi intención era que se corriera fuera, pero entre la excitación del momento y mi torpeza levanté la mano derecha. Al cabo de un momento noté las últimas embestidas de Manuel y un chorro de líquido caliente inundando mi boca y mi garganta. Era de un sabor bastante duro y agrio pero la excitación hizo que lo saboreara y lo tragara con gusto. Manuel sacó su polla de mi boca y me dijo

- Si quieres escupir hay un baño saliendo a mano derecha.

-Es que me lo he tragado todo.
-Bien pues no te importará limpiarme bien la polla.

Y dicho eso me ofrece la polla y yo la lamí con gusto. Cuando acabé Manuel se volvíó a subir los pantalones y se puso la camisa. Yo continuaba arrodillado desnudo con una excitación terrible. Se lo hice ver a Manuel
-Que quieres que hago yo. Considera esto como una prueba para tu admisión. Si estas palote te haces una paja.
-Quieres decir que puedo trabajar aquí.
-Si

Yo estaba tan contento. Me había incorporado y tan excitado como estaba continué acariciándome la polla. Cuando empezaba a hacerme la paja que me había aconsejado Manuel, me dice

- No aquí no te hagas la paja. te la haces en tu casa o donde coño vivas, pero aquí no. Vamos a hablar de la condiciones del trabajo.

Yo me quedé perplejo, fui a vestirme, pero Manuel me detuvo:

- No te vistas. la primera condición de tu trabajo, es que aquí estarás siempre desnudo. Cuando llegues, lo primero que debes hacer es dirigirte a la cocina de este piso que tiene unas taquillas. Quitarte la ropa y darte una ducha para limpiarte por fuera y por dentro. Roberto es mi ayudante y tu supervisor. él te dirá el que.

- Después te vas a la sala que has visto al entrar, con los otros chicos y allí esperas a los clientes. Tu ganarás el 50% por cliente, cuantas más cosas estés dispuesto a hacer más ganarás. Los precios por servicio los pongo yo. La mitad es para ti y la mitad para la casa. Una mamada del cliente a ti son 2000PTA (todavía había pesetas). Si se la haces tu al cliente son 3000 PTA si exiges condón o 5000 si lo haces sin goma. Si se corren en tu boca son 8oooPTA la mamada. Si tu follas (con mamada incluida) al cliente son 12000 si el cliente te folla a ti con condón son 15000, sin son 20000. Haz lo que quieras, pero yo te recomiendo siempre la goma son 5000 menos pero podrás hacerte muchos. No quiero chicos enfermos. Puedes compensar convenciéndoles de que tomen algo. Hay whisky, ginebra, ron, vodka y cava y champagne. Lo que más beneficio deja es el champagne. Son 20000 la botella. Tu te llevas 5000PTA de comisión. Ahora eso sí procura no beber demasiado, porque puedes tener otros clientes esa noche.

-¿Noche?. Es que estoy en una residencia (no dije cual). Y a las 12 de la noche cierran.
- Vaya con la cenicienta. Así que papá y mamá te quieren durmiendo. Y para que coño vienes a buscar este trabajo.
-Yo había pensado venir por la tarde...
-Claro que tendrás que venir, algunos días a las cuatro de la tarde y otros a la siete, según disponibilidad de los otros chicos, pero ofrecemos servicios hasta las cinco de la madrugada.
- pero yo estudio por la mañana.
- Y a mi que me importa. No todos los días estarás hasta las cinco pero si hasta las dos o las tres de la mañana. Los sábados y domingos tendrás que venir por la mañana a las 10 y el horario será hasta las cinco o las seis de la mañana igual que los viernes. Algún lunes, cuando te toque por turno, podrás pillártelo libre. Pero piensa que cuanto más trabajes más ganarás y más caprichos te pagarás. Y tu tienes cualidades para ganar dinero en esto.

Ese era un buen argumento. Yo había ido para ganar dinero y no depender de mis padres. Además tenía ganas de disfrutar de buen sexo, sobretodo después de la mamada a Manuel. No dije nada y acepté todas las condiciones. Para acabar me dice,

- Tu estás dispuesto a hacer todo, follar y ser follado ¿no?.

Le dije que sí, aunque en ese momento lo que deseaba más que nada es ser follado por la polla que acababa de comerme.

-Bien, entonces hay que preparar muy bien tu primera vez, estarás contento de lo que tu culo te va a dar. Déjame arreglarlo y ven el próximo sábado.
Intenté quejarme "esperaba empezar ya".
-No puede ser ahora, espera hasta el sábado, tienes una joya y hay que revalorizarla. Ven el sábado a las 8 de la tarde.

Y quedamos así. Cuatro días me quedaban para iniciarme como chapero, "masajista" o como se dice ahora "scort". Durante esos cuatro días estuve nervioso, incluso dubitativo acerca de como cambiaría mi vida esta nueva "profesión" pero en ningún caso arrepentido.

Llegó el sábado y mi excitación no podía ser mayor. Me dirigí al piso donde estaba instalado el lupanar de Manuel. Me abríó Roberto el supervisor, un chico de unos 28 a 30 años, delgado pero con cierto atractivo. No iba completamente desnudo. Llevaba unos slips. me hizo pasar a la cocina, que disponía de una cafetera y un microondas. Roberto me dijo que si quería café podía utilizarla y el microondas por si quería llevar comida de casa y calentarla allí. Le dije que no había pensado en llevarla y me dijo que no me preocupara que los otros chicos compartirían conmigo. Me dio una taquilla y me dijo que me desnudara. Lo hice mientras Roberto me miraba. Volví a empalmarme, aunque Roberto no dijo nada. Me hizo acompañarle a un cuarto de baño y me dijo que entrara en la ducha. El mismo se quito el slip, tenía un buen pollón flácido e imaginé como debía ser en erección. Entró conmigo en la ducha y cogió la manguera, empezó a mojarme. Yo no entendía nada. Yo podía ducharme solo, pero no dije nada. Me preguntó si estaba bien el agua le dije que si. empezó a frotarme con gel el cuerpo. El cuello, el pecho, los brazos, la espalda, las nalgas. Inició un frotamiento en el ojete. Friccionaba rápido. Yo seguía empalmado, excitado. Dejó el ojete y siguió por las piernas, me hizo girarme, mi polla quedaba a la altura de su cara, pensé que me la iba a chupar. Pero no, siguió lavándome los pies con gel, los dedos, me hizo levantar las plantas, siguió por una pierna, subiendo hacia mi erecta polla. en ese momento me fijé que la suya estaba como mínimo morcillona. Se estaba excitando. Cuando llegó a mi polla, empezó a frotármela,, lavándome el pubis, el tallo, el glande y bajando a los huevos. Volvió a la zona perianal. Yo pensaba que me iba a correr del gusto. Volvió a los huevos y a la polla. De manera rítmica siguió frotando. Yo le dije que estaba a punto de correrme y entonces dejo de frotarme la polla y subió a mi abdomen. Puso mas gel en su mano y siguió frotando el abdomen y bajo hacia la otra pierna para lavarla igualmente. Yo llevaba un buen calentón. Y por la envergadura de su polla él también estaba caliente. Estaba erecta.

Cuando acabó con la pierna, Roberto me dijo que me girase y me inclinase. Yo lo hice, mientras le miraba con la cabeza girada hacia atrás. Él se puso una buena cantidad de gel en los dedos e inmediatamente empezó a frotar nuevamente el ojete. En ese momento me dice

-Si te duele dímelo.

Y empiezo a notar como se introducen sus dedos en mi ano, girando lentamente y frotando suavemente por dentro. Yo me meaba del gusto. Mi polla continuaba firme. La suya también. Después de unos minutos de tener en mi culo dos o tres dedos de Roberto, me dice

-Ahora tendrás una sensación rara en el culo.

Pensé que se refería a ese calentón que no se si era el masaje interno o el gel, pero no, veo que conecta a la manguera de la ducha una pera de latex y acto seguido me la enchufa en el culo. Le da al grifo y empieza a llegar un chorro de agua más caliente de lo que esperaba. Doy un respingo y Roberto lo advierte.

-¿Te he quemado?
-No pero está un poco caliente

Lo graduó a templado. Empieza a llegar a mi culo agua templada y placentera. Empieza a llenármelo y empiezo a tener esa sensación de que me va a salir. Se lo digo a Roberto.

- Es lo que te dije, que tienes una sensación rara pero tienes que aguantar. Cierra el culo.

Yo seguí sus instrucciones, pero tenía la sensación que el agua me llenaba incluso el intestino.

- No pasa nado. Aguanta, hasta que te quite la pera.

Un momento después apaga el agua, se sitúa a mi lado. Yo inclinado tengo su enorme polla erecta a 10 cm de mi boca, con unas ganas enormes de comérsela. Me quita la pera y me dice ya puedes sacar el agua. Sale un chorro de mi culo que yo adivino mirando a través de mis piernas. Me dice Roberto,

-Ahora tengo que volver a llenarte el culo de agua para que te quede limpio del todo.

Y vuelve a repetir la operación. Una vez vaciado, Roberto sale y se seca. Le pido una toalla y me dice que todavía no ha acabado, entonces veo que coge un bote de espuma de afeitar y una gilette. Me dice que me acerque. Lo hago y empieza a extender espuma en su mano sobre el poco vello púbico que tengo. Empieza a afeitármelo.

-Así, con lo imberbe que eres, sin pelos en la polla te revalorizas ante los clientes.

Yo no entendía nada. Cuando acaba con el pubis me vuelve a untar espuma en las pelotas y me rasura los cuatro pelos que tengo allí. cuando acaba me dice que me gire y me incline. Empecé a pensar que esa sería una postura habitual en mi nuevo trabajo. Me abre los cachetes me pone espuma en el ojete y me rasura tan rápido que intuyo que debía tener otros cuatro pelitos allí..

Me dice

-Listo, y me seca con otra toalla.

Se pone el slip, mostrando el bulto que provoca su polla empalmada y me dice que le acompañe. Pensaba que me llevaba a la sala, pero volvemos a pasar por delante y puedo ver tres chicos desnudos muy buenos, riendo y charlando. Ellos me miran y uno me saluda con un gesto de la mano. Hago lo mismo. Nos dirigimos al despacho que conocí el primer día. No sabía si encontraría a Manuel. Roberto abre la puerta y casi me empuja adentro. Ahí está Manuel con su traje y su corbata:

- Hola Luis, Roberto te ha dejado apañadito. Estás muy buenorro y pareces tan inocente. Pero vamos, llevas esa empalmada como siempre. Desde luego Roberto, lo has puesto bien cachondo con la ducha. Y veo que él también te ha puesto a ti.

Dirigiéndose al supervisor y a su polla que habían entrado tras de mi.

- Pero bueno, este caramelito de Luis no es todavía para nosotros, tiene un dueño que ha pagado mucho por romper su culito virgen. Mira Luis, te está esperando en la suite un caballero, antiguo cliente, muy educado y tu estás a su nivel. Espera un chico. le he dicho que probablemente no eres mayor de edad, para sacarle más pasta. Le gustan los jovencitos y en los últimos tiempos pocos culos vírgenes le he podido conseguir. Intenta satisfacerlo como lo hiciste conmigo. Es muy exigente, pero también si le gustas puede ser muy generoso. es todo un caballero, conde o marqués de provincias. No puedo decírtelo porque aquí no pedimos identificaciones. Alguna vez ha comentado él algo. Sé bueno con él y él sabrá agradecértelo espléndidamente. He conseguido 150000 pesetas por tu culo toda la noche. Le he dicho que la política de la casa es el condón. Tienes las gomas en la mesilla. Si te insistiera hacerlo sin, exige como mínimo 50000 más. Persuádele de tomar champagne en algún momento de la noche. Ah. por cierto, búscate un nombre artístico. En este mundo no se da nunca el nombre auténtico.

Yo tenía al alcance de mi mano 75000 y podía incrementarlo y además un posible cliente de buena posición. Estaba dispuesto a aprovecharlo. Cierto que yo estaba a su altura. La familia de mi madre también pertenece a la nobleza de provincias. Por lo tanto estoy acostumbrado a tratar esas convenciones sociales que son tan importantes para esta gente, aunque ahora lo tenía que hacer como puto y desnudo.

- Está bien Roberto, acompáñalo a la suite y preséntalo al señor.

Y ahí vamos Roberto, al que le había bajado su erección que ya no se notaba a través del slip, y yo más caliente y más empalmado que nunca pensando en el nuevo cliente y en el dinero que me podía reportar.

Llegamos Roberto me pregunta que nombre y yo improviso y le digo Iván pensando que suena a nombre de puto. Roberto arquea las cejas en un gesto de incomprensión y se introduce en el dormitorio. Oigo que saluda y entrecruza con el cliente unas frases de cortesía y me anuncia. Entonces me llama como Iván. Mi sorpresa es mayúscula cuando entro completamente desnudo en la habitación.

Pero esa es una historia que ya contaré en otra ocasión.












.














e

 

Relatos Porno
Los relatos eróticos más leídos

 

ENVÍA TU RELATO ERÓTICO

 

Más relatos eróticos

Relatos eroticos