Relatos Eróticos Primera Vez

Fue sin querer, pero ocurrió | Relatos Eróticos de Primera Vez

Publicado por JOSÉ EDUARDO el 07/04/2017

Pase por muchas cárceles de la argentina, debido a que siempre fui un delincuente que se dedicaba a robar en la modalidad asaltos con armas de fuego, a pesar de vivir de esa manera, nunca lastime a nadie y las armas sólo se usaban para amedrentar a los que eran robados (nunca robe a nadie que fuera pobre) aunque se que eso no es excusa para hacer lo que hacía.
En mi vida de libertad soy sexualmente bi pasivo y cuando estaba preso era un suplicio porque no podía ser yo sexualmente.,
se imaginan lo que significa ser ""el puto del pabellón"" ni siquiera se me pasaba la idea por la cabeza, además del otro sufrimiento de tener que compartir con los otros presos las duchas y ver tanto cuerpo de hombres desnudos y no todos pero si muchos muy lindos y bien dotados.,tener que verlos en pelotas es y no es agradable, porque deceas meterte en la boca ese pedazo de carne y sentir que te penetró bien profundo y lento, tener una erección es motivo de burlas, lo que hace que compartas la risa para que todo quedé ahí como que fue por tocarte los huevos o la pija.
También a veces compartis celda con otros presos que sentís que a veces se pajean pensando en que dormís y no es así porque también te estas pajeando porque te excita el ruido que hace el.
Siempre me gusto jugar al fútbol y mucho más cuando me encuentro preso,
un día que jugaba con los otros presos al fútbol me golpeo con otro tipo mal pero de forma casual y no pude seguir a causa del dolor en mi espalda cerca del hombro derecho.. Me acompaña a mi celda un muchacho más joven que yo por cerca de los diez años y se ofrece a ayudarme con unos masajes en la zona dolorida a lo que accedí sin ninguna doble intención. Porque como dije antes no se me pasaba por la mente el ser el puto del pabellón, manuel (ficticio) saco el colchón de la cama para colocarlo en el suelo y me ayuda a recostar sobre el mismo porque sólo no podía, con un poco de crema de manos comienza a hacer los masajes que realmente al calentar la zona dolorida no se pasaron pero si me calmaron bastante y me sentí menos dolorido.
Sin embargo en un movimiento de mi brazo izquierdo con el codo y en forma involuntaria tocó en la entrepierna de manuel y estaba con una semi erección y también note que el pobre no sabía cómo evitar lo que le pasaba, me mato la cabeza el morbo pero pudo más el sentido común y no hice nada que hiciera ver mi condición sexual,terminó de hacerme los masajes y me ayudo a sentarme en mi silla mientras que el ubicaba el colchón en la cama. Tomamos unos mates y charlamos de todo un poco.,era la primera vez que aparte de los saludos de la buena convivencia compartía algo con el,eso pasó durante la mañana tipo diez , a la tarde vino a verme y preguntar por el dolor que ya me dolía mucho porque se me enfrió el cuerpo, no me había bañado desde el golpe y le pedí que me acompañe a darme un baño, cosa que en seguida hizo ayudándome a levantarme de la cama para ir a las duchas, me bañe como mejor pude y me seque del mismo modo. Al final me acompaña a mi celda y se ofrece a darme más masajes, accedí y se dispuso a poner nuevamente el colchón en el suelo donde me acuesto boca abajo y sólo me cubre el toallon de baño, se vuelve a untar con crema las manos y comenzó con los masajes yo ya no estaba como antes del primer masaje y veía entre sus piernas alguna posibilidad de erección nuevamente,la pija se le notaba mucho más que en la mañana y buscaba yo la forma de tocarlo en forma que parecía casual y el constante aumento de su erección me hizo olvidar de todo el cuidado que siempre tuve y comencé a gemir de manera que se excite más.
En un movimiento que adrede hice le sobe los huevos y la pija, no daba más de ganas de comerme esa pija por todos los agujeros que uso para cojer y le dije que ya estaba bien con los masajes y me ayudo a sentarme en la silla.. Comencé a decir lo que había notado que le pasaba cuando me hace los masajes y el se noto incómodo y trataba de esconder su pija, cosa que no podía, le pregunté si sabía lo que era un ser humano bisexual contestandome que no, es al que le gusta tanto un hombre como una mujer para cojer, me miraba estrañado por lo que le decía y para no hacer más largo el relato y también porque ya no tenía retorno lo que le decía además de que no quería que se le pasará su excitación., de una le dije que yo era bisexual pasivo, (que también le dije de que se trata) lo vi dudando y me dio miedo de haber metido la pata entonces le pedí que si no está de acuerdo con cojerme que no contará nada amenazando con hacerle daño si así lo hace.
Lo pensó un poco y me dijo que nunca había estado con un hombre que no sabía que hacer. Vos déjame a mi y si no te gusta lo dejamos ahí, mientras le decía esto me acerqué a el despacio porque no podía mover mucho mi cuerpo a causa del dolor en mi espalda y no quería que se espante, cuando lo tuve cerca alargue mi mano y le acaricio encima del pantalón su pija que ya no estaba tan dura como antes, pero no dijo nada y me dejó hacer, suavemente lo acaricio y el responde a mi caricia cerrando los ojos, vestía un pantalón corto con calzoncillos bien apretado al cuerpo, le saque la pija del pantalón no sin antes mordiendo despacio sobre el mismo durante un buen rato para ver que pasaba y como todo venia bien se la saqué y le di una mamada que creo yo todavía debe recordar, la situación era muy rara para mí porque se me pasaba por la mente el miedo de que se supiera mi mas grande secreto con las ganas de disfrutar del momento tan especial y rico ( hacia mucho que no tenía nada con un hombre) le chupaba la pija y lo desnudaba poco a poco el gemia de placer y yo no paraba de desvestirlo y acariciar sus piernas, tetillas y todo su cuerpo sin dejar la pija porque lo masturbaba al mismo tiempo que lo besaba hasta que llegue a sus labios que no besé de una sino que poco a poco el mismo me fue dando su lengua que chupe de manera suave mientras lo seguía desnudando cuando ya no tenía nada encima lo acosté sobre el colchón boca arriba y seguía chupando su pija y con los dedos me dilataba yo sólo porque el no sabía que hacer, sólo se dejaba llevar con la pija bien parada me subí sobre el y comencé la penetración hasta donde daba su pija, ( de medida normal ) muy buena para quien lleva un tiempo deseando una buena pija. Lo cabalge hasta que se vino en mi culo con una fuerza en el chorro de leche caliente que no pude seguir más y le termine en su panza (cosa que no le gustó mucho al principio, y me lo dijo) pero cuando le chupe de nuevo la pija para limpiar los restos de leche también le limpie la leche de su panza y me lo tome todo.
Al final lo volví a hacer terminar pero esta vez con mi boca tragando todos sus jugos y yo acabe otra vez más con la boca llena de un sabroso semen.
Cojiamos siempre que podíamos quedar solos en mi celda y nunca nadie supo nada.

 

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