Relatos porno de Gays
Relatos eróticos de Gays
Sorpresa inesperada al acudir a la ferranchina.
El viernes por la tarde luego de comer y haber echado una siesta me empecé a preparar, tenÃa que acudir a la ferranchina a buscar el transformador, el viejo Leonardo, me habÃa prometido tenerlo listo, que acudiera a última hora de la tarde, que si estaba cerrada la puerta de la ferranchina, que petase en el portalón, que él iba a estar dentro esperándome. SabÃa que además de darme el transformador, me iba a volver a dar una buena ...
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Relatos eróticos de Gays
Me vendi a un maduro casado en la prepa
Esto me paso hace unos años, les contare de mÃ, me llamo Ale y vivo en la ciudad de México, desde muy chico fui muy curioso en cuento a la sexualidad, y desde pequeña edad me sentà atraÃdo a chicos y chicas, pero siempre fui muy tÃmido, al cumplir 18 años estudiaba en una preparatoria de la ciudad, y debido a otras razones mis padres me descuidaban mucho y no estaban al pendiente de mÃ, era en ese momento delgado y de ...
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Relatos eróticos de Gays
Vuelvo a la ferranchina, siendo follado de nuevo.
Aquella semana habÃa acudido a la ferranchina para ver si Leonardo, el viejo dueño de esta me podÃa rebobinar un pequeño transformador, y además de conseguir que me lo rebobinara, habÃa terminado con el culo abierto y su larga polla llenándome el culo de leche. Me habÃa follado poniéndome a 4 patas sobre el viejo camastro que tenÃa en la ferranchina.
Al principio me habÃa sorprendido y hasta preocupado la proposición que me ...
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Relatos eróticos de Gays
Me hizo maricon y dispuesto a gozar
Luego de haber sido convertido por Rocio en un maricon afeminado, me propuse disfrutar sin remilgos mi nuevo rol.
Asi que luego de comprar lenceria muy sexy, maquillaje pinturas peluca y un perfume muy oloroso, me hospede en un motel de paso, solicite a la recepckon me comunicaran a algunas agencias de masajes y fui solicitando servicio de h h pero era dificil encontrar al chico soñado para esa tarde noche. Habia hablado a mas de 8 agencias ...
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Relatos eróticos de Gays
Adicto a la polla del viejo de la ferranchina.
Él al ver que yo no reaccionaba y no me movÃa del sitio, volvió a llevar mi mano a su entrepierna diciéndome, tócala, no seas tonto, mira lo que te pierdes, yo sé que te gusta, me decÃa haciendo que mi mano volviera a palpar aquel bulto que al viejo le colgaba. Ya verás cómo te va a gustar más que la de tu amigo
HacÃa años que no iba a una ferranchina, desde mis años de adolescente en el que Ãbamos a vender cobre, plomo, ...
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