Relatos porno de Gays
Relatos eróticos de Gays
Rozando la prostitución, me ofrecen ejercer de chapero.
Siendo un adolescente sabÃa que existÃa la prostitución, pero nunca habÃa sospechado que, en el ambiente gay, habÃa gente que se dedicara a eso. Yo lo descubrà como suele suceder por otra persona, fue un viejo que un dÃa siendo yo todavÃa un adolescente, me descubrió rondando los aseos públicos y acercándose a mÃ, me invitó a ir con él, al yo negarme, me ofreció dinero, cosa que además de sorprenderme me dejó pensativo. Al ...
Leer relato erótico >
Relatos eróticos de Gays
Hay dÃas que encuentras lo que buscas.
Dios, cuando lo vi el estómago se me estremeció, era como un revoloteo de mariposas que tenÃa por todo el abdomen, los huevos me hacÃan cosquillas y hasta el culito me palpitaba.
Hay veces que te cansas de buscar y buscar, y terminas follando, en mi caso suele ser siendo follado, por la persona menos esperada. Unas veces porque tienes tal calentura que ya todo te da igual, otras porque es tan pero que tan lanzado e insistente, que ...
Leer relato erótico >
Relatos eróticos de Gays
Espiado mientras me daban por el culo.
¿Te gusta? Me preguntaba acariciando mis pelotas y abdomen con sus manos, haciendo que me fuese calentando y animando.
Contesté que sÃ, moviendo la cabeza en señal afirmativa, mientras miraba con lascivia aquel órgano sexual que acariciaba con mi mano. Iba descapullando aquella verga, viendo como asomaba un enorme enrojecido e hinchado glande. Ya tenÃa pringada toda la cabeza de lÃquido preseminal, a causa de la excitación que ...
Leer relato erótico >
Relatos eróticos de Gays
Me rompen el culo en el puerto de Montevideo.
todas aquellas personas no me quitaban la vista de encima, y como veÃan como aquel milico me agarraba por mis partes, hablándome de aquella manera. Todos estaban pendientes de mi reacción, viendo que yo callaba y no decÃa nada, solo veÃan mi enrojecimiento, y como mi paquete empezaba a reaccionar a la mano del milico, empezando a abultarse cada vez más.
HacÃa 2 horas que habÃamos llegado al puerto de Montevideo, teniendo que ...
Leer relato erótico >
Relatos eróticos de Gays
Tino, mi perverso vecino, me rompe el culo en su casa 2.
Me sujeté a su cabeza enredando mis manos sobre su pelo, mientras quedaba mirando exhorto como le colgaba bamboleándose, aquella enorme pija, de la cual colgaban 2 enormes cojones al viejo y perverso de nuestro vecino tino.
Dios, como podÃa entrar aquella cosa por el agujero de nuestro culo. Realmente estaba alucinado de lo que nuestros jovencitos culos, podÃan tragarse. Y es que nuestros rabos al lado de aquella verga, se veÃan ...
Leer relato erótico >